El sí de Reagrupamiento Nacional permitiría que el nuevo grupo liderado por Orbán, Patriotas por Europa, se convierta en el tercer grupo más grande de la Eurocámara por encima del partido que lidera Giorgia Meloni
El mapa de la ultraderecha se configura en el Parlamento Europeo. Patriotas por Europa, la alianza impulsada por Victor Orbán, ya cumple los requisitos para convertirse en grupo parlamentario tras sumar a los diputados de Vox y ahora a los de Vlaam Belang, la formación flamenca de extrema derecha. El partido de Orbán, el Fidez, sin afiliación en la eurocámara desde que fuera expulsado del Partido Popular en 2021 aspira ahora a aglutinar las fuerzas más ultras Estraburgo con un liderazgo desde el este, un discurso euroescéptico y contrario al multicuturalismo y a la ayuda militar y financiera a Ucrania. Grupo que podría convertirse en el tercero en la eurocámara, por encima del de Meloni, si suman los 30 eurodiputados de Marine Le Pen y los de Salvini. Algo que puede ocurrir este lunes. Un movimiento que dan por hecho varios medios comunitarios esta mañana y que sugería anoche Jordan Bardella tras conocer los resultados electorales en Francia.
«Entusiasmo en París, decepción en Moscú, Alivio en Kiev»
A falta de un pronunciamiento oficial -en Bruselas siempre hay cautela o frases genéricas a la hora de interpretar un resultado en un estado miembro-, las palabras de Donald Tusk, el primer ministro polaco, anoche en redes sociales, resumen la sensación de alivio en la capital comunitaria. Escribía Tusk: «Entusiasmo en París, decepción en Moscú, Alivio en Kiev. Suficiente para ser feliz en Varsovia».
La victoria del Frente Popular impide que dirija el gobierno de la segunda economía del euro y de uno de los pilares de la UE, un partido abiertamente euroescéptico y contrario a la ayuda a Ucrania. Aunque pasado el susto, todavía quedan curvas a las que estarán muy atentos en la capital comunitaria. Ahora se esperará a una formación de gobierno que se antoja muy difícil, al tiempo que la extrema derecha se reconfigura en el Parlamento Europeo, y donde parece que el partido de Le Pen podrá tener un papel clave en el nuevo grupo impulsado por Orban: Patriotas por Europa.
Los 30 eurodiputados de Le Pen acaban formando parte de este grupo, como sugería anoche Bardella sería la delegación más grande y, junto a los diputados de Salvini, esta amalgama de partidos con un liderazgo desde el este, discurso euroescéptico y contrario al multiculturalismo, y donde ahora está Vox o la extrema derecha de Países Bajos, podría consolidarse como tercera fuerza por los diputados que está pescando en los últimos días por encima del grupo que lidera Giorgia Meloni. Un golpe para la coalición europeísta en la que se va a apoyar la nueva Comisión, y un altavoz de peso para las ideas de Le Pen que permitiría que el discurso contrario a la ayuda a Ucrania o manifiestamente euroescéptico sea el tercer grupo más grande de una Eurocámara muy fragmentada.