CSIF facilita a los mutualistas de Adeslas y DKV las reclamaciones que pueden presentar «si se les deniega algún tratamiento o prueba médica»
Más de 3.500 profesores de la Comunidad Autónoma, funcionarios del Estado y policías nacionales de la Región que reciben asistencia sanitaria privada de Adeslas y DKV deberán pasarse ahora a Asisa o a la sanidad pública, si sus aseguradoras acaban retirándose de Muface, tal y como han anunciado.
Ante el desconcierto en el que se encuentran los mutualistas adscritos a Adeslas y DKV en este momento, CSIF ha elaborado sendos modelos de reclamación para los funcionarios que «vean cancelado o suspendido algún tratamiento, prueba médica o intervención de cualquier tipo».
El sindicato explica en un comunicado que los mutualistas deberán enviar sus reclamaciones a la compañía a la que están adscritos y a Muface. También precisa que para poder acudir a la vía de lo contencioso en caso de que lo consideren necesario deberán agotar previamente los plazos de los recursos administrativos.Ç
Asisa, que en este momento es la única compañía dispuesta a continuar en el concierto con la mutualidad, tiene 31.638 funcionarios adscritos en Murcia, lo que supone cerca del 90% de los mutualistas murcianos. Otros 18.000 ya están en la Seguridad Social y son atendidos en la sanidad pública.
La retirada de SegurCaixa Adeslas y de DKV dejaría sola a Asisa, que atiende en toda España a cerca de 364.000 funcionarios. En la Región Adelas tiene unos 2.800 mutualistas y DKV, algo más de 800.
El plazo para acudir a la segunda licitación termina el próximo 15 de enero a las 10.00 horas, pero Adeslas ya había escrito una carta a los mutualistas comunicándoles que dejará de prestarles asistencia el 31 de enero y ha anunciado su intención de no concurrir a la nueva convocatoria. También DKV ha comunicado su retirada.
La primera licitación de Muface, que establecía una subida del 17%, quedó desierta. El Gobierno ofrece ahora una subida del 33,5% en la segunda convocatoria, pero Adeslas y DKV consideran que sigue siendo deficitaria y que les generará unas pérdidas millonarias que no están dispuestas a asumir.
La incógnita que se plantea ahora es si Muface podría seguir funcionando con una sola compañía, dado que Asisa tiene en este momento cerca de 364.000 mutualistas de 1.072.51 que reciben asistencia privada en España.
En total, Muface tiene 1,5 millones de beficiarios, pero cerca de 460.000 reciben asistencia de la Seguridad Social.
La Consejería de Salud calcula que la desaparición de Muface obligaría al SMS a asumir la atención a los 35.000 funcionarios de la Región con asistencia privada, lo que generaría un gasto de 55 millones a Comunidad Autónoma.
Salud viene advirtiendo al Gobierno central desde hace meses de que «exigirá garantías por escrito» de que recibirá la compensación económica en caso de que naufrague el sistema actual de Muface.
El ministro para la Transformación Digital y Función Pública, Óscar López, recuerda que Muface ha subido al 33,5% la prima que reciben las compañías para atender a los funcionarios y asegura que este incremento eleva en 1.000 millones de euros la oferta anterior, informa Europa Press.
«Estamos metiendo 1.000 millones de euros adicionales para financiar Muface, es decir, dinero suyo, mío, de todos los ciudadanos, de los Presupuestos Generales del Estado, para financiar el seguro privado de 1,5 millones de ciudadanos», ha defendido el ministro.
«Creo también que hay una reflexión pendiente, posterior, una vez que se firme ese concierto, porque estamos hablando de un modelo muy antiguo que acumula también ciertas imperfecciones, ciertas cosas que se pueden mejorar», ha reconocido el ministro, que ha enviado un mensaje de tranquilidad a los mutualistas.
El Gobierno ha anunciado una prórroga de tres meses en el concierto con las aseguradoras, que garantiza la asistencia hasta que se resuelva la licitación en marcha.