La subida del nivel del mar provocará la pérdida de playas en la totalidad del litoral murciano, según Greenpeace

El informe anual ‘Crisis a toda Costa’, basada en previsiones de la NASA, alerta sobre la emergencia climática

Estas son las zonas con mayor riesgo de pérdida de playas en la Región de Murcia

Playa de Levante en Cabo de Palos. ARCHIVO / PACTO POR EL MAR MENOR

El puerto de San Pedro del Pinatar, Portmán, el tramo de costa desde el Gorguel hasta la Azohía, Puerto de Mazarrón, Calnegre, Calabardina y Águilas son las zonas con mayor riesgo de pérdida de playas en la próxima década. Así lo recogen las previsiones de la NASA mencionadas en el informe anual de Greenpeace, ‘Crisis a toda Costa’, que alerta sobre los riesgos de la emergencia climática y la turistificación masiva.

La subida del nivel del mar ocasionará la pérdida de playas en la totalidad del litoral murciano y lo hará en tan solo una década, según la entidad conservacionista, que se basa en modelos de la NASA a partir de datos del panel de cambio climático internacional.

A esta subida del mar añade Greenpeace el aumento de eventos meteorológicos extremos, lluvias y sequías, el incremento constante de la temperatura de mares y océanos y la pérdida de oxígeno disuelto en el agua, así como los efectos de la turistificación masiva, como principales causas del peligro.

En una entrevista en el programa PLAZA PÚBLICA, María José Caballero, responsable de Costas de Greenpeace, ha recordado que, de media, se estima que por cada centímetro que suba el nivel del mar, la costa retrocederá un metro. La emergencia climática obliga a tomar medidas urgentes, señala Greenpeace. Entre ellas revisar los deslindes de dominio público con arreglo a las previsiones.

La organización advierte sobre «soluciones desfasadas» que están suponiendo un gasto muy importante de dinero público: entre ellas la reposición de arena que se pierde con los temporales cada vez más frecuentes o la construcción de paseos marítimos con hormigón. Otra de las propuestas es la revisión de las zonas inundables. Sólo en Cartagena, indica Greenpeace, hay 15.000 viviendas en riesgo. 

Para hacer frente a estos riesgos, Greenpeace defiende que «tan sólo con una reducción moderada de las emisiones de gases de efecto invernadero se podría evitar el 40% del retroceso de las playas de todo el mundo» y apuesta por medidas de adaptación a todos los niveles (municipal, autonómico y estatal) que minimicen los daños y busquen soluciones reales y duraderas.

«Las soluciones aplicadas hasta ahora, como las regeneraciones artificiales de playas y la reconstrucción de paseos marítimos, ya no sirven. Cada nuevo temporal destruye las costosas intervenciones artificiales que no atienden a la raíz del problema. Sólo entre 2016 y 2020 se gastaron cerca de 60 millones de euros en la reposición artificial de arena en las playas», subraya Caballero.

La ONG considera que las soluciones han de ser locales, porque cada tramo de litoral tiene características propias, pero deben ser acordadas por las administraciones y participadas por la ciudadanía de forma urgente. «Proteger y conservar las playas supondría un beneficio 150 veces superior a dejar que sigan deteriorándose», precisa.