Un antiguo empleado de una firma de informática roba portátiles y videoconsolas por valor de medio millón de euros

Formaba parte de un grupo delictivo que ha sido desarticulado por la Guardia Civil y en el que se ha incautado material electrónico sustraído, turismos de alta gama y hasta una embarcación adquirida con los beneficios

SERGIO GÓMEZ  ORM
28 MAR 2025 – 17:45
Un antiguo empleado de una firma de informática roba portátiles y videoconsolas por valor de medio millón de euros

Guardia Civil con parte del material sustraído. GUARDIA CIVIL

Un antiguo empleado de una conocida firma de distribución de material informático ha sido detenido junto a otras cuatro personas acusado de pertenecer a una red que sustraía todo tipo de material de dicha empresa para ser revendido en el mercado, obteniendo cuantiosas ganancias.

La Guardia Civil de la Región de Murcia ha desarrollado la operación ‘Klug’, una investigación iniciada para esclarecer la sustracción de gran cantidad de artículos electrónicos de una empresa dedicada a la distribución de componentes informáticos, que ha culminado con la desarticulación de un grupo delictivo en Murcia, donde se ha detenido a cinco personas e investigado a otras cuatro, como presuntas autoras de los delitos de pertenencia a grupo criminal, estafa, estafa en tentativa, acceso indebido a programa informático.

Durante la operación, en los dos registros domiciliarios realizados, los guardias civiles han recuperado parte del material electrónico sustraído y se han incautado de dos turismos de gama alta y una embarcación adquiridos con beneficios de la actividad delictiva ahora esclarecida.

Las actuaciones se iniciaron a principios de año, cuando efectivos de Prevención de Seguridad Ciudadana de la Benemérita abrieron la operación para verificar una serie de indicios relacionados con la supuesta apropiación indebida de gran cantidad de productos del stock de una popular empresa de distribución de material informático y electrodomésticos, entre otros.

Los responsables de la empresa denunciaron una serie de irregularidades cometidas, al parecer, por un antiguo empleado. Los guardias civiles constataron un fraude en el que se habría apropiado productos, principalmente potentes ordenadores portátiles y video consolas, valorados en cerca de medio millón de euros.