La juez de Cieza ordena el ingreso en prisión del presunto homicida, que asegura que actuó solo, y la Guardia Civil da por resuelto el caso 11-08-2017 09:22:06
LA VERDAD
El expediente por la muerte a golpes de José María Lifante, alias ‘El Cartagena’, vecino de Barinas de 46 años de edad, pasó ayer de la estantería de casos pendientes a la de resueltos. Al menos, así lo consideran, a todos los efectos, los agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil que a lo largo de ocho meses se han estrujado las meninges para dar con el presunto homicida. La carga probatoria recae contra un vecino de la cercana población de Mascinvenda, también perteneciente al municipio de Abanilla, cuya identidad responde a las iniciales J.J.C.R., aunque es más conocido por el sobrenombre de ‘Torrente’.
Fuentes próximas al caso confirmaron ayer que el sospechoso habría confirmado la autoría del crimen, que se habría producido a raíz de una violenta discusión con la víctima, que era bien conocido entre los jóvenes de la comarca por dedicarse a la venta al menudeo de cocaína. En el transcurso del enfrentamiento, ‘Torrente’ habría cogido un objeto de gran contundencia, en apariencia una barra de hierro, y habría golpeado con saña a ‘El Cartagena’ en la cabeza, hasta que este cayó desvanecido entre dos coches. La magnitud de las lesiones provocó que la muerte se produjera en pocos minutos.
Siempre según las mismas fuentes’, el acusado explicó que nadie más le acompañaba cuando se produjo la discusión que acabó con ese luctuoso desenlace.
Después de tomarle declaración, la juez de guardia de Cieza ordenó ayer su ingreso en prisión como presunto responsable del homicidio de José María Lifante.
Meses atrás, la Guardia Civil detuvo a otro vecino de Macisvenda, después de que algunas pruebas recabadas en el escenario del crimen, el garaje en el que ‘El Cartagena’ reparaba y vendía coches de segunda mano, apuntaran a que había estado en ese lugar. Las conclusiones a las que han llegado los investigadores apuntan a que este segundo sospechoso podría haber llegado a la casa de Barinas unos minutos después del crimen, y sin que el cadáver todavía caliente del camello pudiera disuadirlo, habría registrado el local en busca de droga y dinero.
Aunque quede libre de cargos por el homicidio, puede seguir encartado en las diligencias que coordina el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Cieza, acusado de robo e incluso de un posible delito de omisión del deber de socorro, si se establece por parte de los forenses que ‘El Cartagena’ podría haber seguido vivo y le negó el auxilio que necesitaba.
Un hombre muy desconfiado, que no abría la puerta a desconocidos
Los policías judiciales que desde el primer momento asumieron la investigación del homicidio de ‘El Cartagena’ no tardaron en centrar el foco de sus pesquisas. Por un lado, el crimen estaba relacionado muy probablemente con la actividad de tráfico de drogas que desarrollaba la víctima y que motivaba que numerosos jóvenes de la comarca visitaran su garaje. Probablemente, pensaban, una discusión o un intento de quitarle la cocaína y el dinero habían motivado el crimen. De otro lado, todo les hacía pensar que el asesino era alguien bien conocido por el camello, ya que todos los testigos lo definían como una persona muy desconfiada y que no abría la puerta a desconocidos. La detención de ‘Torrente’ ha confirmado ambas hipótesis.