Los trabajos para ampliar el Centro de Visitantes de la Muralla se centran ahora en restaurar los panteones, la muralla y antemuralla
LA OPINIÓN
El cementerio árabe del barrio murciano de Santa Eulalia ha visto la luz tras siglos enterrado bajo tierra. Esto ha sido posible gracias a los trabajos que se están desarrollando para la ampliación del Centro de Visitantes de la Muralla de Santa Eulalia, con los que se quiere recuperar parte de los restos que se conservaban bajo tierra del cementerio musulmán, la muralla y la antemuralla.
Las obras arrancaron el pasado mes de enero y está previsto que se prolonguen hasta final de este año 2023, según explica a La Opinión el arquitecto director de la obra, Francisco Guerao, una excavación que ha permitido sacar a la luz los restos que ya se sabía que había en el subsuelo.
Guerao insiste en que la recuperación de los restos del cementerio musulmán era algo que ya se contemplaba en el proyecto, «pese a que algunos intentan confundir y lanzar mensajes en redes sociales alarmando sobre lo que se ha encontrado».
El proyecto de ampliación del Centro de Visitantes de Santa Eulalia contempla la unión subterránea de estas instalaciones con los dos edificios que hay al otro lado de la plaza, creando un circuito subterráneo a través del cual se pondrán visitar los restos del cementerio, de la muralla y de la antemuralla, fechados entre los siglos IX y XIII.
El arquitecto Francisco Guerao señala que en estos últimos días se ha descubierto el cementerio, cuyos trabajos se encuentran vallados para proteger los restos que van apareciendo, y se están restaurando los panteones que hay en él.
Al mismo tiempo indica que el cementerio tiene unas grandes dimensiones, ya que parte de él está en la zona de los trabajos, en la plaza de Santa Eulalia, pero se extiende hasta la iglesia de este barrio murciano.
La ampliación del Centro de Visitantes es uno de los cinco ejes de la iniciativa Murcia Eterna, con la que se quiere recuperar la muralla medieval de Murcia.
Este proyecto implica la puesta en valor de un espacio de 1.305 metros cuadrados, incluyendo 200 metros de recorrido y 50 metros lineales de lienzo de muralla árabe intacta datado, según sus partes, entre el siglo IX y el XIII, una barbacana y antemuralla.
Además, contempla la recuperación de los restos del cementerio musulmán que reposan en los bajos del edificio Almudaina, entre los que se encuentran varios panteones islámicos únicos.
El proyecto articulará un recorrido subterráneo bajo la plaza, justo en la cota del suelo islámico comunicando los dos espacios y permitiendo pasear y disfrutar del patrimonio medieval de Murcia de forma única, según indican desde el Ayuntamiento de Murcia.
«A finales de 2023 podremos disfrutar de la recuperación de un nuevo espacio, que nos recuerda que atesoramos mucho pasado bajo nuestros pies», afirman.