El presidente regional no logra convencer el resto de grupos parlamentarios: PSOE, Sumar y Podemos (Mixto) tachan la proposición de ley de estrategia populista y Vox asegura que la única solución es un Plan Hidrológico Nacional

El presidente regional, Fernando López Miras, este martes en el Congreso de los Diputados / Jesús Hellín/ Europa Press
Alejandro Lorente 13 MAY 2025 18:17 LA OPINIÓN
El presidente regional, Fernando López Miras, ha defendido este martes, desde la tribuna de oradores del Congreso de los Diputados, la toma en consideración de la proposición de ley aprobada por la Asamblea Regional en marzo de 2023 para que las normas de explotación del trasvase Tajo-Segura y el caudal ecológico del río de la cuenca cedente queden en la misma situación en la que estaban en 2014, respetando así las disposiciones del Real Decreto 773/2014, de 12 de septiembre, el último gran acuerdo en materia de agua en España. Con la defensa de esta proposición de ley, el jefe del Ejecutivo autonómico pretende blindar el acueducto e impedir que se apliquen los recortes previstos en las nuevas reglas de de explotación, que hace unos días comenzaron a tramitarse y que incluyen un ‘hachazo’ del agua para el regadío agrícola del Levante español que alcanzaría gradualmente el 50 por ciento en 2027.
A la vista de las intervenciones del resto de grupos parlamentarios, no parece que el presidente vaya a recabar los votos necesarios para que la proposición de ley prospere e inicie su tramitación. Tanto el Grupo Parlamentario Socialista como los diputados de Sumar y Podemos (en el Grupo Mixto) han calificado la iniciativa popular como una estrategia demagógica que sólo promueve el conflicto entre territorios. Por su parte, la diputada de Vox ha avanzado que si la propuesta lograra salir adelante, su Grupo presentaría una enmienda a la totalidad. La votación de la proposición se llevará a cabo a última hora de esta tarde, aunque podría retrasarse hasta mañana.
López Miras inició su intervención destacando que se dirigía a los diputados por mandato de la Asamblea Regional y «desde la convicción de que mis palabras representan la voluntad mayoritaria de los españoles». A lo largo de toda su exposición, el jefe del Ejecutivo murciano hizo continuas apelaciones al diálogo y al consenso. Según Miras, «las grandes reformas que nos han hecho avanzar como país o las decisiones en cuestiones de estado que han marcado el progreso de España durante los últimos 46 años» siempre han sido fruto de un gran pacto nacional. Sin embargo, la manera de hacer política del presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, en los últimos años ha favorecido las decisiones unilaterales y «sin el concurso del poder legislativo» y que las diferencias se transformen en «enfrentamientos entre territorios y en crispación social». Por todo ello, el presidente regional invitó a todos los grupos parlamentarios a que dejaran atrás esa política unilateral y que aprovecharan este debate como «un punto de inflexión a la hora de abordar la gestión hídrica en nuestro país».

La comitiva murciana en el Congreso contó con la presencia del presidente del Scrats, Lucas Jiménez. / Chema Moya/EFE
En su defensa del mantenimiento del funcionamiento del trasvase Tajo-Segura, López Miras puso en valor el acuerdo alcanzado en 2013 entre el Gobierno de España, presidido por Mariano Rajoy, y las comunidades autónomas afectadas por la infraestructura: Madrid, Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana, Extremadura y la Región de Murcia. «El consenso alcanzado suponía certidumbre para la sociedad en su conjunto, para que los agricultores produjeran alimentos, para que las inversiones productivas fueran viables y para que los hogares de millones de españoles tuvieran garantizado también su abastecimiento», indicó el presidente, que explicó que la proposición de ley que defiende busca rechazar la ruptura de ese acuerdo y volver a la senda del diálogo. «No abandonemos la vía del consenso, mientras no encontremos uno mayor», sentenció.
En este sentido, insistió en la necesidad de que se elabore un gran pacto nacional del agua que incluya una planificación conjunta «sin divisiones territoriales», basadas en criterios técnicos y científicos, «alejados de posicionamientos ideológicos». Ese plan, según Miras, debe contar con presupuesto para invertir en el mantenimiento de las actuales infraestructuras y en nuevas, relacionadas con la contención ante episodios climatológicos extremos, con el almacenamiento y la distribución (para aumentar así la reserva hídrica del país), y con la regeneración y reutilización de las aguas urbanas, un aspecto en el que la Región de Murcia destaca por haber llegado al 98 por ciento de la regeneración, frente a la media nacional del 10 por ciento. En cuanto a la desalación, el presidente regional volvió a referirse a ella como una opción «complementaria» que no puede sustituir el agua del trasvase, ya que «por sus propias características técnicas sería inviable».
Para Miras, ese gran pacto urge más que nunca debido al grave problema al que se va a enfrentar España en 2027 «con el cierre de los acuíferos, algo que hará inviable el acceso al agua incluso para abastecimiento en algunos territorios de nuestro país«.
«López Miras vive de alimentar la crispación», denuncia Francisco Lucas
El encargado de dar la réplica por parte del Grupo Parlamentario Socialista, fue el secretario general del PSRM, Francisco Lucas, quien lamentó que el PP «haya montado un paripé en el Congreso de los Diputados para confrontar y no haya aportado ninguna propuesta para garantizar el agua que necesita la Región de Murcia». Para Lucas, una de las pruebas de lo que él considera un artificio político es el silencio del presidente nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo, «que no se ha manifestado para apoyar al presidente de la Región de Murcia».
Según Lucas, lo que hoy se ha debatido no es la continuidad del trasvase Tajo-Segura, sino la toma en consideración de una iniciativa impulsada por el PP, a través de la Asamblea Regional, que «vulnera varias sentencias del Tribunal Supremo y la Directiva Marco del Agua, y que, además, incumple de forma fragante el Pacto Regional del Agua que se alcanzó en 2018, rompiendo la unidad de acción de las fuerzas políticas de la Región». Para el líder de los socialistas murcianos, el PP «no quiere resolver el problema, vive de alimentar la crispación y de enfrentar a unos territorios con otros; López Miras no ha venido al Congreso a resolver nada, sino a hacerse una foto, a confrontar y a seguir viviendo de las guerras del agua, como lleva haciendo su partido los últimos 30 años”.

El diputado y secretario general del PSRM, Francisco Lucas, este martes en el Congreso. / PSOE
Lucas comenzó su intervención asegurando que el cambio climático es una realidad y que España es una de las zonas de Europa más sensibles a sus consecuencias, especialmente en la Región de Murcia. Por ello, advierte que es necesario adaptarse a un futuro «con más sequías, también en la cabecera del Tajo». En este sentido, destacó que la hoja de ruta del PSOE pasa por «garantizar agua para siempre en la Región de Murcia, mediante «un modelo hídrico diversificado que combina el trasvase, la desalación, la depuración de aguas y la modernización de regadíos«. Aquí, el diputado socialista sacó pecho por el trabajo realizado por los gobiernos socialistas en España, que son los que, en su opinión, han garantizado con sus inversiones, el agua en la Región. «Las desaladoras que pusieron en marcha los gobiernos socialistas han garantizado el agua en nuestra comunidad, también en los momentos más difíciles”, sentenció Lucas, quien recordó que en la actualidad esas infraestructuras se están ampliando gracias a una «inversión histórica»: más de 700 millones de euros «para ampliar desaladoras, interconectarlas y reducir su coste usando energías renovables”.
«La iniciativa del PP es un engaño y una temeridad», señala Vox
La diputada de Vox por Murcia, Lourdes Méndez, calificó de “triple estafa” la gestión del agua por parte del Partido Socialista y del Partido Popular y acusándolos de traicionar a los agricultores del Levante español. “Zapatero derogó el Plan Hidrológico Nacional para imponer un plan de desalación que no tiene fondos para los subsidios necesarios. Rajoy engañó a los agricultores prometiendo un trasvase del Ebro que jamás llegó, y Sánchez está ejecutando la política criminal de la Agenda 2030, un fanatismo climático que solo trae ruina y muerte al campo español”, afirmó Méndez.
Tras advertir que el inminente recorte del trasvase Tajo-Segura es una «injusticia histórica» que está poniendo “en pie de guerra al Levante español”, Méndez defendió que sólo un Plan Hidrológico Nacional puede dar respuesta a las necesidades de los agricultores del Levante. Con respecto a la iniciativa del PP afirmó que es inútil y sólo sirve para “alargar la agonía de los agricultores” con promesas vacías. “La reforma del PP es un engaño y una temeridad. Pretenden hacer creer a los agricultores que van a blindar el trasvase, cuando saben perfectamente que esta reforma no garantiza ni una gota más de agua”, reprochó la diputada de Vox, quien explicó que la propuesta del PP, que afecta únicamente a las reglas de explotación, no desactiva el plan del Tajo ni la Ley de Aguas, y tampoco elimina el caudal ecológico detraído de más de 100 hectómetros cúbicos. “El PP quiere hacer creer que blindando la norma de 2014 se evitaría el recorte producido, y eso no es verdad. Esta reforma no aporta ni un halo de esperanza a los agricultores del Levante porque no soluciona el problema de fondo: la falta de una política nacional del agua”, insistió.

La diputada por Murcia de Vox en el Congreso, Lourdes Méndez, en el debate de la toma en consideración de la propuesta del PP. / Vox
En su intervención, Méndez también cargó contra el Gobierno de España por «financiar desaladoras en Marruecos» y contra el PP y el PSOE por votar en Bruseñas contra de una política de interconexión de cuencas propuesta por Vox.
Podemos carga contra la incoherencia de PP y PSOE
Por su parte, el diputado de Podemos Javier Sánchez Serna criticó duramente la “incoherencia y el oportunismo político” del presidente murciano, López Miras. “No le voy a preguntar por los agricultores del Noroeste afectados por la granizada porque ya vimos que, con alerta naranja, usted prefirió irse a beber manzanilla a la Feria de Abril”, dejó caer al comienzo de su intervención. Sánchez Serna recordó que esta propuesta “nace viciada por el transfuguismo —fue aprobada en la Asamblea de Murcia con el apoyo de siete diputados tránsfugas— y forma parte de la guerra del agua que PP y PSOE alimentan desde hace décadas”. “En cada territorio dicen una cosa distinta. En Murcia piden blindar el trasvase y en Castilla-La Mancha lo quieren limitar. ¿A quién hay que creer?”, se preguntó.
Frente a ese juego político, Podemos defendió un paquete de medidas “reales y sostenibles” para garantizar el futuro hídrico de la Región de Murcia: mejora de las infraestructuras de desalación mediante energías renovables (fotovoltaica y eólica) para abaratar el coste del agua desalada, recuperación de los acuíferos como reservas hídricas estratégicas, evitando su sobreexplotación en años húmedos, refuerzo del control público del agua, combatiendo el robo de recursos y las prácticas ilegales y creación de seguros públicos frente a la sequía meteorológica para garantizar la viabilidad económica del sector agrícola. “El trasvase no lo va a cerrar ningún gobierno, lo cerrará el cambio climático si no actuamos ya”, ha advertido el diputado».