El procedimiento de revisión en la Junta Electoral se ha iniciado a instancias de VOX, que sostiene que entre los votos destruidos había algunos que les eran favorables
JOSÉ ANTONIO MARTÍNEZ/ PACO MARTÍNEZ
El escrutinio definitivo de las elecciones municipales en Ceutí está en manos de la Junta Electoral Central, que va a tener que resolver qué hacer con el escrutinio de dos mesas que decidieron destruir todos los votos, incluIdas 27 papeletas consideradas nulas, después de constatar que todas las partes estaban de acuerdo con el escrutinio realizado. El procedimiento de revisión en la Junta Electoral se ha iniciado a instancias de VOX, que sostiene que entre los votos destruidos había algunos que les eran favorables. A VOX le faltan tres votos para conseguir un concejal más que -además- podría dejar sin mayoría absoluta al Partido Socialista.
La candidata socialista a la reelección en la alcaldía de Ceutí, Sonia Almela, dice no entender las dudas que se han generado en torno a los resultados registrados en esas dos mesas electorales. Según explica, la Ley Orgánica de Régimen Electoral, la LOREG, autoriza la destrucción de todas las papeletas (incluidos los votos nulos) si el recuento se cierra sin registrar ninguna incidencia. Y ese, asegura, fue el caso: las actas de la mesa coinciden con las de los interventores de los partidos políticos y las del representante de la administración. Todas las cuentas cuadran y nadie planteó ningún tipo de duda.
Todos, dice Almela, estaban de acuerdo el domingo. Pero VOX, que no tenía interventores en esa mesa, presentó una reclamación para que se revisaran todos los votos considerados nulos, al entender que algunos de ellos les podían ser favorables, según indica el diputado autonómico electo por VOX, Rubén Martínez Alpáñez.
La alcaldesa en funciones insiste en que no hay argumentos para generar ningún tipo de sospecha. El acta del representante de la administración coincide con la documentación de la mesa y de los interventores de los partidos que asistieron como observadores al recuento. Sonia Almela dice estar viendo «cosas extrañas» en los últimos días y se resigna a tener que esperar a la decisión que adopte la Junta Electoral Central.
Lo malo, añade, es que se está generando la idea errónea de que el proceso electoral en el que el PSOE obtuvo una victoria muy contundente (más de 1.000 votos sobre el PP y casi 2.000 más que la tercera lista más votada) estaba viciado de alguna manera. No le gusta tampoco la idea de que el de Ceutí sea el único ayuntamiento que no pueda constituirse el próximo día 17.