Natalia y Agustín fueron condenados el año pasado a penas que sumaban 20 años de cárcel por matar y quemar vivo al ex de ella
Era el mes de noviembre cuando el crimen de La Puebla tenía veredicto: Natalia y Agustín, culpables de asesinato, estableció el jurado popular. Cabe recordar que durante la vista, en la Sección Quinta de la Audiencia Provincial, con sede en Cartagena, los dos procesados se culparon mutuamente.
Días después, sentencia. 20 años de cárcel para Natalia y Agustín por quemar vivo a Juan Manuel, el ex de ella. Sin embargo, esto se ha quedado en agua de borrajas. El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Murcia ha anulado la sentencia y ordena repetir el juicio. Las actuaciones se devuelven a la Sección Quinta de la Audiencia Provincial, «para celebración de nuevo juicio por distinto magistrado del que presidió el anulado», indica el TSJ en una resolución fechada el 27 de septiembre.
El TSJ detecta «déficits de consistencia, coherencia y sistemática en referencia al objeto del veredicto y al acta de votación del jurado», los cuales «se extienden a la declaración de hechos probados de la sentencia apelada».
En verano de 2021, a Juan Manuel lo golpearon con una llave inglesa en la cabeza, atropellaron, metieron malherido en un coche y quemaron vivo. El forense determinó que la causa de la muerte fue intoxicación por monóxido de carbono y quemaduras durante el incendio del automóvil.
En otoño pasado, la Audiencia condenaba a cada uno de los procesados a 15 años de prisión por el delito de asesinato; a 4 años por el delito de detención ilegal y a un año por el de daños.
«Cúmulo de carencias»
Ahora, el TSJ pone el acento en que «el cúmulo de carencias, defectos e irregularidades denunciados implican una desviación palmaria del modelo de enjuiciamiento por jurados diseñado en nuestro ordenamiento, hasta el punto de hacerlo irreconocible en el caso presente».
El veredicto
El tribunal del jurado consideró con su veredicto que los dos jóvenes que se sentaban en el banquillo eran culpables no solo de asesinato, sino de daños y de detención ilegal. Los jurados, además, sostenían que tanto Natalia como Agustín (este con un leve retraso mental) cometieron los delitos siendo plenamente conscientes de lo que hacían y sabiendo distinguir el bien y el mal.