Las mineras sonaron en la parroquia Nuestra Señora del Rosario en la voz de Encarnación Fernández, acompañada por Antonio Muñoz a la guitarra, con la tradicional ofrenda a los mineros
Joaquín Hernández Paredes y Ana Balsalobre Nieto recibieron sus distinciones al ‘Minero’ y la ‘Viuda del Minero’ ante el cariño y cercanía del público de la ‘Catedral del Cante’
La Agrupación Musical de La Unión, la Coral Argentum y la Escuela ArteDanza representaron «las manifestaciones culturales más genuinas y singulares de La Unión», tal y como destacó Joaquín Zapata
Guadiana, Pedro Ojesto y Joni Jiménez impregnaron el Antiguo Mercado Público de su complicidad, con una fusión perfecta de toque, cante e instrumentación
La Unión es quejío, baile, música, raíz, legado y vida. Y solo hizo falta pasear ayer por sus calles para darse cuenta de que todo esto se pone de manifiesto en el que es, desde ayer, el epicentro del flamenco a nivel mundial con la celebración del LXII Festival Internacional del Cante de las Minas. La jornada prólogo del evento de flamenco más famoso del mundo quiso rendir homenaje a su sede, La Unión, mostrando «las manifestaciones culturales más importantes, singulares y genuinas que tenemos en el municipio» tal como anticipó el presidente de la Fundación Cante de las Minas, Joaquín Zapata.
La tarde empezó haciendo sonar mineras, cartagenera, malagueña, levantica y otros cantes en la voz de Encarnación Fernández, acompañada de Antonio Muñoz al toque, en la parroquia Nuestra Señora del Rosario, con la tradicional ofrenda en homenaje a los mineros. Tras este acto, el corte de cinta a cargo de Joaquín Zapata y el director del Festival, Julio García Cegarra, acompañados de la corporación municipal, abrió las puertas de la Avenida del Flamenco, iluminando su pórtico para augurar una brillante 62ª edición del Festival. Los visitantes pudieron descubrir los stand que acompañan la subida a la ‘Catedral del Cante’, un templo que se encendió con la magia de las creaciones de Esteban Bernal Aguirre, con puestos de minerales, abanicos muy flamencos o a la degustación de un sabroso café asiático.
Fueron el homenaje al ‘Minero’ y a la ‘Viuda del minero’ los que inauguraron los actos dentro del Antiguo Mercado Público de La Unión. Emocionado, Joaquín Hernández Paredes, apenas pudo dirigirse a un público que aplaudió este reconocimiento, que recibió «con agrado», afirmando con rotundidad un «nunca lo olvidaré». Ana Balsalobre Nieto, viuda de Juan Cortado, cautivó con un carisma que le llevó a recordar la historia de amor con su marido, cuando le puso un «champagne y unas almendricas» en el bar de su padre, convirtiéndose cinco años después en su marido. Recordó unos versos que su marido le escribió a su hijo, recitando ante un aforo completo que se rindió ante su naturalidad. «Va por mi marido y por todos los mineros», dijo dedicando el reconocimiento.
«Estos actos sirven para conmemorar a los mineros que dieron sentido a La Unión y a los Cantes de las Minas, recordando que fueron el origen de su auge», indicó Zapata, describiéndolo como «un día de gozo, por esos cantes que siguen viviendo en nuestro corazón».
Exhibición de la cantera del talento unionense
La noche permitió mostrar el talento de la tierra. Fue la Agrupación Musical La Unión la que comenzó deleitando a los asistentes con tres piezas enmarcadas dentro del flamenco-jazz, con pasodoble, una fantasía de retratos españoles y un duelo de trompetas solitas y la banda sinfónica con estructuras flamencas. Se unió la Coral Argentum para interpretar el himno de La Unión.
El baile vino después, con la cantera de la Escuela ArteDanza, que dirigidas por María Elena Lorente deleitaron con la expresión más corporal del flamenco con soleá, guajira, tangos y alegrías. La muestra demostró «que no hay edad para conseguir los sueños», ya que sus alumnas mostraron su talento desde los 7 hasta los casi 60 años. «Todo se consigue con trabajo y constancia», matiza la profesora, que quiso lanzar un guiño al cielo para que la fundadora de la Escuela, Cloti Corví, viera «el inmenso legado que ha dejado para el baile y la ciudad de La Unión».
Contrastes flamencos
Fue Pedro Ojesto quien salió al escenario, cogió el micrófono y presentó sus ‘Contrastes flamencos’ con una primera pieza al piano, los soleares ‘Bronce gitano’ del maestro Sabicas. El cantaor Guadiana y Joni Jiménez se le sumaron después, formando el trío musical perfecto para sumergir a La Unión en el arte jondo, en el que conviven el toque, el cante y la instrumentación protagonizada por el piano. Su complicidad impregnó la ‘Catedral del Cante’ desde el primer momento, que les acompañó con sus tientos, caña, una taranta de Chacón, siguiriya y tangos.
El trío tenía claro que querían «desarrollar su propio lenguaje dentro de la tradición», tal y como contó tras el concierto Ojesto, que definió a Guadiana como «el mejor eco flamenco que hay ahora mismo». «Hemos sentido ese ambiente necesario para poder expresar lo que tenemos dentro», recalcó Guadiana, quien a pesar de definirse como autoexigente, se mostró «contento» con la noche unionense.
El día del pregón y la Gala de Ganadores
Mañana tendrá lugar la segunda jornada del LXII Festival Internacional del Cante de las Minas con el tradicional pregón, que este año correrá a cargo del Cronista Oficial de La Unión y decano de la Facultad de Economía y Empresa de la UCAM, Gonzalo Wandosell Fernández de Bobadilla. La noche en la ‘Catedral del Cante’ la protagonizarán las actuaciones de los ganadores del concurso de 2022: Esther Merino (‘Lámpara Minera’), Álvaro Mora (‘Bordón Minero’), Ángel Bocanegra (‘Filón’), Irene Lozano (‘Desplante Femenino’) y David Romero (‘Desplante Masculino’).
También habrá eventos durante la tarde dentro de la Agenda Cultural, en el Salón de Actos de la Casa del Piñón. Desde las 20:00h se presentará el documental ‘Familia Piñana, una pasión flamenca’ a cargo de su director, Antonio Parra, y Paco Jarauta. Tras esto, se le entregará el ‘Castillete de Oro’ al que fuera primer guitarrista oficial del Festival Internacional del Cante de las Minas.