Aunque la teoría del robo está sobre la mesa, la Policía baraja otras hipótesis, como que al hombre lo mató alguien a quien conocía
Las armas del crimen aún no han aparecido y los investigadores toman declaración al entorno de la víctima
LA OPINÓN
La Policía Nacional continúa investigando la muerte de Francisco B.A., el anciano cuyo cadáver, con signos de violencia, era hallado en su casa de Yecla el miércoles por la noche. Aunque la teoría del robo está sobre la mesa, los investigadores barajan otras hipótesis, como que a Francisco lo mató alguien a quien conocía, y al que él habría dejado entrar en su vivienda.
Del caso se han hecho cargo tanto los investigadores de la Comisaría de Yecla como el Grupo de Homicidios. Se encuentran tomando declaración al entorno del difunto a fin de conocer aspectos de su vida que lleven a un rápido esclarecimiento del homicidio.
A Francisco B.A., según informan fuentes cercanas al caso, lo golpearon en la cabeza con un objeto contundente y lo apuñalaron con un destornillador. Las armas del crimen aún no han aparecido.
En el caso de tratarse de un ladrón al que el vecino descubrió en el interior de su domicilio, llama la atención la extrema violencia con la que habría actuado al verse sorprendido. Los asaltantes de casas, apuntan fuentes policiales, suelen vigilar las propiedades que son su objetivo, a fin de acceder a las mismas cuando están vacías, ya que su fin es robar, no matar. De ahí que no se descarta que a Francisco le quitase la vida un conocido, en el marco de una discusión.
Hallado por los vecinos
Francisco vivía solo en un bajo de la calle Algeciras, donde se encontró su cadáver. Los vecinos se percataron de que la puerta llevaba abierta todo el día, pero no había rastro del hombre. Hasta que, ya de noche, se decidieron a entrar y encontraron primero un reguero de sangre y, al lado, a Francisco en el suelo, bocarriba. Presentaba signos de violencia.
Dieron la voz de alarma y al lugar se movilizaron sanitarios, que únicamente pudieron certificar el deceso. Los vecinos aseguraron que el interior de la casa estaba bastante revuelto, como si alguien hubiese estado buscando algo de valor para robar.
A la casa de la calle Algeciras también se movilizaron especialistas de la Brigada de Policía Científica de la Policía Nacional, que trataron de buscar vestigios y huellas que lleven a los investigadores a identificar al autor o autores de la muerte.
Tercer crimen del año en la Región
El de Yecla es el tercer crimen del año en la Región y de los tres se hace cargo la Policía Nacional. El primero está resuelto y se saldó con el arresto de cuatro personas por matar, de una puñalada en el corazón, a un vecino en una gasolinera de Lorca. El segundo ocurrió el domingo pasado en la calle Santa Rita, en Murcia, donde apareció un hombre muerto en un charco de sangre. Se sospecha que lo mató un conocido en el transcurso de una discusión. La Policía busca al sujeto y espera dar en breve con él. El tercero es el crimen de Yecla. Aunque la principal hipótesis sea el robo, la investigación lleva apenas unos días en marcha y no se descartan otras. De ahí que los investigadores indaguen en su entorno y tomen también declaración a vecinos y allegados, para dilucidar si hay algo en la vida de Francisco que pueda llevar a esclarecer quién lo mató.