Estas organizaciones, con tentáculos en la Región, se valen de ‘bots’ para conseguir sacar turno por Internet y lo revenden a precios exorbitantes
Una organización criminal desarticulada por la Policía Nacional, con un detenido en la Región, obtenía cerca de 9.000 euros mensuales -cada uno de sus miembros- con la venta fraudulenta de citas de extranjería. En total fueron detenidas 21 personas: una en Murcia, 17 en Alicante y las tres restantes en Valencia. Sin embargo, la existencia de tramas como esta no suponen un caso aislado, apuntan fuentes policiales.
No es una práctica nueva: abogados y gestores llevan tiempo denunciando que las citas previas online para extranjería están controladas por mafias. Delincuentes con escasos escrúpulos que se aprovechan de la vulnerabilidad de la gente: migrantes que necesitan la documentación y se ven abocados a pagar para acelerar un trámite que, en teoría, es gratuito.
«La falta de citas supone la pérdida de derechos de solicitud de asilo así como de otros trámites para la regularización, además de una violencia institucional silenciosa que se agrava cada vez más», remarcaban en verano desde entidades como Convivir Sin Racismo, Asociación PAREM, Amigos de Ritsona, faAM, Plataforma de la Inmigración, Afro Murcia, ILP Regularización Ya, Coordinadora de ONG y Murcia Acoge. Sin embargo, lo que pasa no es que no haya citas: es que todas están cogidas ya por los ‘bots’ que emplean los delincuentes para revenderlas.
La Oficina de Extranjería de Murcia implantaba hace seis años la cita previa obligatoria
Los mafiosos se están profesionalizando cada vez más: para lograr las citas, usan bloqueos mediante ‘bots’ (programas informáticos que imitan el comportamiento humano) en un servidor informático de la Administración.
Según detallaba la Policía, al desarticular una organización criminal, con tentáculos en Murcia, el año pasado, «el ‘bot’ informático desarrollado por la red tenía la capacidad de evitar los mecanismos de seguridad instalados en la página web destinada a la solicitud de citas online, siendo capaz de librar los llamados ‘captcha’ dirigidos a detectar la presencia de este tipo de programas informáticos».
Formación para delinquir
Además, «los líderes de la organización instruían a los intermediarios sobre la utilización de una conexión VPN (Red Privada Virtual), cuya finalidad era la ocultación de la dirección IP real del intermediario y la posibilidad de acceder a un mayor número de citas, ya que, este sistema, cambiaba la dirección IP de manera automática, evitando que el servidor bloqueara al intermediario por exceso de solicitudes de cita previa», explicaban desde el cuerpo.
Es decir: los ‘bots’ se introducen en la web de citas previas muchísimo más rápido que podría hacerlo un ser humano. Cogen todas las citas disponibles, las bloquean y posteriormente las venden por un módico precio. Fue en el año 2018 cuando la Oficina de Extranjería de Murcia implantaba la cita previa obligatoria. Por eso no se atiende a nadie que vaya de forma presencial a las instalaciones, pero no tenga reserva previa. Como sacar cita es cada vez más difícil, los afectados acaban recurriendo a las mafias.
En el caso de la última organización desmantelada, los delincuentes acabaron teniendo tanta demanda que era necesario un equipo humano que gestionase el elevado volumen de solicitudes. Así que la supuesta cabecilla de la trama fue ‘fichando’ a sus familiares y amigos para delinquir. Les grababa en vídeo tutoriales sobre cómo bloquear las citas para los diversos trámites administrativos.
Monopolizar la oferta
Muchos de estos subordinados tenía como misión acceder al servidor público y monopolizar toda la oferta pública de citas en determinadas zonas de España. Después, otros de los integrantes del grupo se encargaban de introducir en la aplicación ‘Cita Previa’ los datos de filiación falsos para monopolizar el mayor número de citas ofertadas. Otras personas se ocupaban ya de contactar con los migrantes y cobrarles.
Les pedían, por cada reserva entre 15 y 30 euros, cantidades a las que pueden hacer frente las personas con pocos recursos económicos Tenían tantos clientes que, al acabar el mes, se veían con un montante de dinero de cientos de miles de euros. A repartir.
Sin embargo, en la Comunidad operan otras mafias que cobran más: hasta 350 y 400 euros por persona que necesita con urgencia un ‘hueco’ para, por ejemplo, renovar su residencia. Pueden sacar hasta 200.000 euros. No al año: al mes. «Si eran 21 los de la última organización, a 9.000 euros cada uno cada mes, solo hay que hacer cuentas y ver cuánto sacaban», apunta un miembro de la Policía. Un dinero «negrísimo, por supuesto».