Entre un 25 y 30 por ciento de la población mundial padece esta condición, cifra que irá en aumento por la estrecha relación que guarda con la obesidad
La llamada ‘enfermedad del hígado graso no alcohólica’ no la causa la dieta, ni los niveles de ácidos grasos; sino una alteración del metabolismo de lípidos en el propio hígado. Es el principal hallazgo del equipo de investigadores del Instituto Murciano de Investigación Biosanitaria Pascual Parrilla (IMIB), que abre las puertas a nuevos tratamientos para esta enfermedad hepática crónica en la población con obesidad.
La enfermedad hepática de origen metabólico, conocida como MASLD por sus siglas en inglés, consiste en la acumulación de grasa en el hígado. Al entrar en fase avanzada, la enfermedad se cronifica y, además, es un factor de riesgo para el desarrollo de cáncer hepático y enfermedades cardiovasculares.
Existe una alta incidencia, pues es la enfermedad hepática con mayor presencia y se estima que entre un 25 y 30 por ciento de la población mundial la padecen. Además, se espera que la cifra vaya en aumento por la estrecha relación entre esta condición y la obesidad. Sin embargo, aún no se conocen los mecanismos por los que se agrava en el organismo.
Los resultados del estudio, en la que han colaborado investigadores de las Universidades de Gdansk (Polonia) y de Málaga, se publicaron en el ‘Journal of Clinical Endocrinology and Metabolism’ (JCEM) de la Sociedad Americana de Endocrinología (ENDO Society). El Instituto de Salud Carlos III es el principal financiador de la investigación.