El Hallazgo puede originar conflicto entre los municipios de Lorquí y Archena porque ha sido encontrado en la zona de deslinde de ambos
Las autoridades regionales tendrán que decidir en qué museo se expondrá el cofre con las riquezas
La empresa constructora puede optar al 10% del valor por ser los descubridores
En una primera valoración se contabilizan entre 140 y 150 monedas que podrían datarse de entre final del siglo I y siglo II d.C. Se trata de un hallazgo de «incalculable valor y un hito en la arqueología de esta zona íbera», explotada desde tiempos inmemoriales y que tuvo un gran esplendor en época romana, por el Balneario donde ya se encontraron lápidas con inscripciones de esa época.
Según las que se han podido reconocer hasta ahora, hay ejemplares de época de Nerón y de Trajano. El descubrimiento se hizo en el marco de la intervención preventiva que se estaba realizando en el Stock de Gruesos de los movimientos de tierras de la autovía del arco noroeste, a la altura de La Anchosa. En el desarrollo de las tareas, uno de los técnicos de replanteo encontró este conjunto de monedas, que aparecen en su mayoría agrupadas, posiblemente porque se encontraban originalmente dentro de una bolsa de cuero.
Todos los datos apuntan a que se trata de un tesoro escondido, cuyo dueño nunca pudo volver a recuperar. Por el valor de las monedas, de plata y oro, se trataba de una suma muy considerable por lo que se entiende que su propietario fue una persona de relevancia dentro de la jerarquía de la ciudad de Arxila, la Archena romana, que gracias a este hallazgo podemos comprobar que se extendía más al este de lo que se pensaba hasta hoy.