– A barriga llena, corazón contento.
– A buen entendedor, pocas palabras bastan.
– A buen hambre, no hay pan duro.
– ¡A buenas horas, mangas verdes!
– A burro muerto, la cebada al rabo.
– A caballo regalado no le mires el diente.
– A cada cerdo le llega su San Martín.
– A Dios rogando y con el mazo dando.
– A enemigo que huye, puente de plata.
– A falta de pan, buenas son tortas.
– A grandes males, grandes remedios.
– A gusto de los cocineros comen los frailes.
– A la arrogancia en el pedir, la virtud del no dar.
– A la cama no te irás sin saber una cosa más.
– A la tercera va la vencida.
– A la vejez, viruelas.
– A lo hecho, pecho.
– A mal tiempo, buena cara.
– A más años, más desengaños.
– A nadie le amarga un dulce.
– A otro perro con ese hueso.
– A palabras necias, oídos sordos.
– A perro flaco, todo son pulgas.
– A quien cuece y amasa, de todo le pasa.
– A quien madruga, Dios le ayuda.
– A quien mucho tiene, más le viene.
– A rey muerto, rey puesto.
– A río revuelto, ganancia de pescadores.
– A todo se acostumbra uno, menos a no comer.
– A un clavo ardiendo se agarra el que se está hundiendo.
– Abril, aguas mil.
– Afortunado en el juego, desafortunado en amores.
– Agua pasada no mueve molino.
– Agua que no has de beber déjala correr.
– Ahora adulador, mañana traidor.
– Al mejor cazador, se le va la liebre.
– Al pan, pan, y al vino, vino.
– Al perro flaco, todo se le vuelven pulgas.
– Al que Dios se la dé, San Pedro se la bendiga.
– Al que le pique, que se rasque.
– Al revés te lo digo para que me entiendas.
– Algo tendrá el agua cuando la bendicen.
– Amigo por interés no dura porque no lo es.
– Amor con amor se paga.
– Amores reñidos son los más queridos.
– Ande yo caliente y ríase la gente.
– Ante la duda, la más tetuda.
– Antes de hacer nada, consúltalo con la almohada.
– Antes de meter, prometer.
– Antes se coge al mentiroso que al cojo.
– Año de nieves, año de bienes.
– Aprendiz de mucho, maestro de nada.
– Arrieros somos, y en el camino nos encontraremos.
– Asno con oro, alcánzalo todo.
– Aunque la mona se vista de seda. mona se queda.
– Ave que vuela, a la cazuela.
– Bicho malo nunca muere.
– Bien está lo que bien acaba.
– Bien predica quien bien vive.
– Buey viejo, surco derecho.
– Caballo grande, ande o no ande.
– Cada cosa a su tiempo.
– Cada loco con su tema.
– Cada maestrillo tiene su librillo.
– Cada mochuelo a su olivo.
– Cada moneda tiene dos caras.
– Cada oveja con su pareja.
– Cada palo aguante su vela.
– Cada persona es dueña de su silencio y esclava de sus palabras.
– Cada uno cuenta de la feria como le va en ella.
– Cada uno en su casa, y Dios en la de todos.
– Cada uno lleva su cruz.
– Cada uno sabe dónde le aprieta el zapato.
– Cada uno se conoce por sus obras.
– Cada uno tiene lo que se merece.
– Calumnia, que algo queda.
– Casa con dos puertas, mala es de guardar.
– Casarás y amansarás.
– Como éramos pocos, parió la abuela.
– Como se vive, se muere.
– Como siembres, recogerás.
– Con el roce, nace el cariño.
– Con la ayuda del vecino, mató mi padre un cochino.
– Con la intención basta.
– Con la verdad se llega a todas partes.
– Con las glorias se olvidan las memorias.
– Con pan y vino, se anda el camino.
– Consejos vendo, y para mí no tengo.
– Contigo, pan y cebolla.
– Contra el vicio de pedir, la virtud de no dar.
– Contra la fortuna, no hay arte alguna.
– Corazón codicioso, no tiene reposo.
– Coser y cantar, todo es empezar.
– Cree el ladrón que todos son de su condición.
– Cría fama y échate a dormir.
– Cría cuervos y te sacarán los ojos.
– Cuando el diablo no tiene nada que hacer, mata moscas con el rabo.
– Cuando el gato no está, los ratones bailan.
– Cuando el grajo vuela bajo, hace un frío del carajo.
– Cuando el río suena, agua lleva.
– Cuando las barbas del vecino veas pelar, pon las tuyas a remojar.
– Cuando menos se piensa, salta la liebre.
– Cuando una puerta se cierra, otra se abre.
– Cuanto más se tiene, más se quiere.
– Cuanto más viejo, más pellejo.
– Cuidados ajenos mataron al asno.
– Culo veo, culo deseo.
– Da Dios almendras al que no tiene muelas.
– Dame pan, y dime tonto.
– Date prisa despacio, y llegarás a palacio.
– De aquellos polvos, vienen estos lodos.
– De buen vino, buen vinagre.
– De casta le viene al galgo el ser rabilargo.
– De desagradecidos está el infierno lleno.
– De donde no hay, no se puede sacar.
– De la calle vendrá, quien de tu casa te echará.
– De grandes cenas están las sepulturas llenas.
– De herrero a herrero, no pasa dinero.
– De ilusión también se vive.
– De la discusión nace la luz.
– De lo que no cuesta, llena la cesta.
– De lo que no veas, ni la mitad te creas.
– De lo que se come se cría.
– De los amigos me guarde Dios, que de los enemigos me guardo yo.
– De los cuarenta para arriba, no te mojes la barriga.
– De los escarmentados nacen los avisados.
– De mí te reirás, pero de mi dinero, no.
– De noche todos los gatos son pardos.
– De perdidos, al río.
– De tal cepa, tal vino.
– De tal palo, tal astilla.
– De todo hay en la viña del Señor.
– De trigo y avena, mi casa llena.
– De una cebolla no nace una rosa.
– Del agua mansa líbreme Dios, que de la brava me libraré yo.
– Del amor al odio hay un paso.
– Del árbol caído, todos hacen leña.
– Del dicho al hecho hay un buen trecho.
– Del jefe y del mulo cuanto más lejos más seguro.
– Del mar, el mero; de la tierra, el cordero.
– Del viejo, el consejo.
– Dentro de cien años, todos calvos.
– Desdichas y caminos hacen amigos.
– Desgracia compartida, menos sentida.
– Desgraciado en el juego, afortunado en amores.
– Desnudar un santo para vestir otro.
– Desnudo nací, desnudo me hallo: ni pierdo ni gano.
– Después de beber, cada uno dice su parecer.
– Después de la tempestad, viene la calma.
– Detrás de la cruz está el diablo.
– Día de Santa Lucía, mengua la noche y crece el día.
– Días de mucho, vísperas de nada.
– Dicho y hecho.
– Diciendo las verdades se pierden amistades.
– Dime con quien andas y te diré quien eres.
– Dime de que presumes y te diré de que careces.
– Dinero llama dinero.
– Dios aprieta pero no ahoga.
– Dios los cría y ellos se juntan.
– Divide y vencerás.
– Donde dije digo, digo Diego.
– Donde fueres, haz lo que vieres.
– Donde hay confianza, da asco.
– Donde hay patrón, no manda marinero.
– Donde las dan las toman.
– Donde manda el corazón, la cabeza tiene poco que decir.
– Donde menos se piensa salta la liebre.
– ¿Dónde va Vicente?, donde va la gente.
– Dos es compañía, tres es multitud.
– Dos no riñen, si uno no quiere.
– Dos que duermen en un colchón, se vuelven de la misma condición.
– El amor es ciego.
– El avaro, cuanto más tiene, más quiere.
– El bien viene andando; el mal, volando.
– El buen cirujano corta por lo sano.
– El buen paño en el arca se vende.
– El buen perfume se vende en frasco pequeño.
– El buey suelto, bien se lame.
– El casado, casa quiere.
– El comer y el rascar, todo es empezar.
– El dinero hace caballero.
– El fin justifica los medios.
– El fruto prohibido es el más apetecido.
– El gato escaldado, del agua fría huye.
– El hábito no hace al monje.
– El hambre aguza el ingenio.
– El hambre es muy mala consejera.
– El hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra.
– El hombre propone, y Dios dispone.
– El hombre y el oso, cuanto más feo, más hermoso.
– El huésped y el pez, a los tres días hiede.
– El invierno no es pasado mientras abril no es terminado.
– El llanto, sobre el difunto.
– El lloro de la mujer, no es de creer.
– El mejor escribano echa un borrón.
– El mentiroso ha de ser memorioso.
– El muerto al hoyo y el vivo al bollo.
– El mundo es un pañuelo.
– El ocio no quede impune; quien no trabaje, que ayune.
– El ojo del amo engorda el caballo.
– El perro del hortelano, ni come ni deja comer al amo.
– El pez grande se come al chico.
– El poeta nace, no se hace.
– El que a buen árbol se arrima, buena sombra le cobija.
– El que a hierro mata, a hierro muere.
– El que al cielo escupe en la cara le cae.
– El que algo quiere, algo le cuesta.
– El que avisa no es traidor.
– El que busca halla.
– El que calla, otorga.
– El que espera, desespera.
– El que esté libre de pecado, que tire la primera piedra.
– El que fue a Sevilla perdió su silla.
– El que guarda, siempre tiene.
– El que la sigue, la consigue.
– El que mucho corre, pronto para.
– El que mucho habla, mucho yerra.
– El que mucho ofrece, poco da.
– El que no llora, no mama.
– El que no quiera polvo, que no vaya a la era.
– El que no se consuela, es porque no quiere.
– El que no trabaja, no come.
– El que parte y reparte, se queda con la mejor parte.
– El que pega primero, pega dos veces.
– El que quiera peces que se moje el culo.
– El que ríe el último, ríe mejor.
– El que rompe, paga.
– El que se excusa, se acusa.
– El que se pica, ajos come.
– El que siembra viento, cosecha tempestades.
– El que tiene boca, se equivoca.
– El que tiene padrino se bautiza.
– El que tiene un tío en Alcalá, ni tiene tío ni tiene ná.
– El que tuvo, retuvo.
– El que venga detrás, que arree.
– El que vive de favores, sirve a muchos señores.
– El saber no ocupa lugar.
– El sabio siempre quiere aprender, el ignorante siempre quiere enseñar.
– El tiempo es oro.
– El tiempo lo dirá.
– El tiempo perdido no se recupera.
– El tiempo pone a cada uno en su sitio.
– El tiempo todo lo cura.
– En boca cerrada no entran moscas.
– En casa del herrero, cuchillo de palo.
– En casa del pobre, dura poco la alegría.
– En el país de los ciegos, el tuerto es el rey.
– En febrero busca la sombra el perro.
– En la guerra y en el amor, todo vale.
– En la tardanza está el peligro.
– En la variedad está el gusto.
– En martes, ni te cases ni te embarques.
– En tiempo de higos no hay amigos.
– En todas partes cuecen habas.
– Encender una vela a Dios y otra al diablo.
– Entre col y col, lechuga.
– Entre dos amigos, un notario y dos testigos.
– Entre todos la mataron y ella sola se murió.
– Es buena noticia el que no las haya.
– Es de bien nacidos ser agradecidos.
– Es la gota que desborda el vaso.
– Es peor el remedio que la enfermedad.
– Escoba nueva barre bien.
– Gallina vieja hace buen caldo.
– Gallo que no canta, algo tiene en la garganta.
– Gato con guantes no caza ratones.
– Gato escaldado, del agua fría huye.
– Genio y figura, hasta la sepultura.
– Gota a gota, se llena la bota.
– Gusta lo ajeno más por ajeno que por bueno.
– Hablando del rey de Roma, por la puerta asoma.
– Hablando se entiende la gente.
– Habló el buey y dijo mu.
– Haciendo y deshaciendo se va aprendiendo.
– Hambre que espera hartura, no es hambre pura.
– Hasta el cuarenta de mayo no te quites el sayo.
– Hasta el rabo, todo es toro.
– Hay más días que longanizas.
– Haz bien y no mires a quien.
– Hijo sin dolor, madre sin amor.
– Hombre prevenido, vale por dos.
– Hoy por ti, mañana por mí.
– Huir del fuego para caer en las brasas.
– Ir por lana y volver trasquilado.
– Jaula nueva, pájaro muerto.
– Juan Palomo, yo me lo guiso y yo me lo como.
– Juego y bebida, casa perdida.
– La arruga es bella.
– La ausencia causa olvido.
– La avaricia rompe el saco.
– La cabra siempre tira al monte.
– La cara es el espejo del alma.
– La caridad bien entendida empieza por uno mismo.
– La casa se arruina por la cocina.
– La costumbre hace ley.
– La curiosidad mató al gato.
– La ensalada, poco vinagre y bien aceitada.
– La esperanza es lo último que se pierde.
– La excepción confirma la regla.
– La experiencia es la madre de la ciencia.
– La fe mueve montañas.
– La gallina de mi vecina más huevos pone que la mía.
– La hermosura poco dura.
– La ignorancia de la ley no excusa su cumplimiento.
– La intención es lo que vale.
– La juventud tiene la fuerza y la vejez la prudencia.
– La lengua no tiene hueso, pero corta lo más grueso.
– La letra con sangre entra.
– La ley del embudo, para mí lo ancho y para ti lo agudo.
– La manzana podrida pierde a su compañía.
– La mejor palabra siempre es la que queda por decir.
– La mejor salsa, el apetito.
– La mujer del César, además de ser honesta, debe parecerlo.
– La mujer y el oro, lo pueden todo.
– La mujer y el vino sacan al hombre de tino.
– La música amansa las fieras.
– La ocasión la pintan calva.
– La palabra es plata y el silencio es oro.
– La palabra que sale de la boca, nunca torna.
– La peor gallina es la que más cacarea.
– La perseverancia todo lo alcanza.
– La primavera la sangre altera.
– La procesión va por dentro.
– La realidad supera la ficción.
– La respuesta mansa la ira quebranta.
– La suegra y el doctor, cuanto más lejos, mejor.
– La suerte de la fea, la bonita la desea.
– La suerte está echada.
– La unión hace la fuerza.
– La venganza es un plato que se sirve frío.
– La verdad es amarga.
– La vida no es un camino de rosas.
– La viuda rica hace que llora y repica.
– Las apariencias engañan.
– Las armas de fuego, cuanto más lejos, mejor.
– Las comparaciones son odiosas.
– Las cosas de palacio van despacio.
– Las cuentas claras, y el chocolate espeso.
– Las desgracias nunca vienen solas.
– Las madres hacendosas hacen las hijas perezosas.
– Las malas noticias vuelan.
– Las palabras vuelan, y lo escrito permanece.
– Las paredes oyen.
– Las prisas nunca son buenas.
– Libro prestado, libro perdido.
– Lo barato sale caro.
– Lo bien hecho, bien parece.
– Lo bueno poco dura.
– Lo bueno, si breve, dos veces bueno.
– Lo comido por lo servido.
– Lo cortés no quita lo valiente.
– Lo fiado, rara vez pagado.
– Lo olvidado, ni agradecido ni pagado.
– Lo prometido es deuda.
– Lo que a unos mata, a otros sana.
– Lo que bien empieza, bien acaba.
– Lo que de noche se hace, a la mañana parece.
– Lo que en los libros no está, la vida te lo enseñará.
– Lo que es moda no incomoda.
– Lo que mucho vale, mucho cuesta.
– Lo que no has de comer, déjalo cocer.
– Lo que no mata, engorda.
– Lo que no se comienza, nunca se acaba.
– Lo que no se llevan los ladrones, aparece por los rincones.
– Lo que no va en lágrimas va en suspiros.
– Lo que otro suda, a mí poco me dura.
– Lo que poco cuesta, poco se aprecia.
– Lo que se aprende en la cuna, siempre dura.
– Lo que sea sonará.
– Los amigos de mis amigos son mis amigos.
– Los amigos de mis amigos son mis amigos.
– Los años no pasan en balde.
– Los árboles no dejan ver el bosque.
– Los celos son malos consejeros.
– Los duelos con pan, son menos.
– Los huéspedes mucho gusto dan, pero cuando se van.
– Los malos tragos hay que pasarlos pronto.
– Los niños y los locos dicen las verdades.
– Los toros se ven mejor desde la barrera.
– Los trapos sucios se lavan en casa.
– Mal de muchos, consuelo de tontos.
– Mañana será otro día.
– Manitas que no dais, ¿qué esperáis?
– Manos frías, corazón caliente.
– Marido celoso no tiene reposo.
– Marzo ventoso y abril lluvioso sacan a mayo florido y hermoso.
– Más hace el que quiere que el que puede.
– Más discurre un hambriento que cien letrados.
– Más sabe el diablo por viejo que por diablo.
– Más vale caer en gracia que ser gracioso.
– Más vale estar solo que mal acompañado.
– Más vale gastar en pan que en botica.
– Más vale llegar a tiempo que rondar un año.
– Más vale malo conocido que lo bueno por conocer.
– Más vale maña que fuerza.
– Más vale pájaro en mano que ciento volando.
– Más vale prevenir que curar.
– Más vale ser arriero que borrico.
– Más vale tarde que nunca.
– Más vale tener que desear.
– Más vale tuerto que ciego.
– Más vale un mal arreglo que un buen pleito.
– Más ven cuatro ojos que dos.
– Mejor dar que recibir.
– Mucho ruido y pocas nueces.
– Muchos son los llamados y pocos los escogidos.
– Muerto el perro, se acabó la rabia.
– Nadie da lo que no tiene.
– Nadie es profeta en su tierra.
– Nadie escarmienta en cabeza ajena.
– Nadie se acuerda de Santa Bárbara hasta que truena.
– Nadie se meta donde no le llamen.
– Nadie tira piedras a su tejado.
– Ni pidas a quien pidió, ni sirvas a quien sirvió.
– Ni son todos los que están, ni están todos los que son.
– Ni tanto ni tan calvo.
– Ningún jorobado ve su joroba.
– Ninguno escarmienta en cabeza ajena.
– No basta ser bueno sino parecerlo.
– No cantan dos gallos en un gallinero.
– No cantes gloria hasta el fin de la victoria.
– No cojas la pera hasta que esté madura.
– No comer por haber comido no es tiempo perdido.
– No con quien naces sino con quien paces.
– No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy.
– No echéis margaritas a los cerdos.
– No es lo mismo ser que parecer.
– No es más limpio el que más limpia, sino el que menos ensucia.
– No es más rico quien más tiene sino el que menos necesita.
– No es oro todo lo que reluce.
– No es tan fiero el león como lo pintan.
– No hay don sin din.
– No hay enemigo pequeño.
– No hay harina sin salvado.
– No hay mal que cien años dure.
– No hay mal que por bien no venga.
– No hay mayor desprecio que no hacer aprecio.
– No hay peor ciego que el que no quiere ver.
– No hay peor sordo que el que no quiere oír.
– No hay primavera sin flores ni verano sin calores.
– No hay que empezar la casa por el tejado.
– No hay que fiarse de las apariencias.
– No hay que vender la piel del oso antes de haberlo cazado.
– No hay regla sin excepción.
– No hay rosa sin espinas.
– No hay tonto que no se tenga por listo.
– No muerdas la mano que te da de comer.
– No ofende quien quiere sino quien puede.
– No por mucho madrugar, amanece más temprano.
– No quieres caldo, pues toma tres tazas.
– No sabes lo que tienes hasta que lo pierdes.
– No se acuerda el cura de cuando fue sacristán.
– No se ganó Zamora en una hora.
– No se hizo la miel para la boca del asno.
– No se puede estar en misa y repicando.
– No se puede hacer tortilla sin romper los huevos.
– No sólo de pan vive el hombre.
– No te cierres una puerta, si no has abierto otra.
– No te rías del mal de vecino, que el tuyo viene de camino.
– No tires piedras sobre tu tejado.
– No todo el monte es orégano.
– No vendas la piel de oso antes de haberlo cazado.
– Nuestro gozo en un pozo.
– Nunca digas de este agua no beberé.
– Nunca es tarde si la dicha es buena.
– Nunca falta un roto para un descosido.
– Nunca llueve a gusto de todos.
– Nunca segundas partes fueron buenas.
– Obras son amores, que no buenas razones.
– Ojo por ojo, diente por diente.
– Ojos que no ven, corazón que no siente.
– Otro vendrá que bueno me hará.
– Oveja que bala, bocado que pierde.
– Palos con gusto no duelen.
– Pan con pan, comida de tontos.
– Pan para hoy, y hambre para mañana.
– Para ese viaje no se necesitan alforjas.
– Para muestra, un botón.
– Paso a paso se va lejos.
– Pelillos a la mar.
– Perro ladrador, poco mordedor.
– Pesar ajeno, no quita el sueño.
– Piensa el ladrón que todos son de su condición.
– Piensa mal y acertarás.
– Pleitos tengas y los ganes.
– Poco a poco se llega antes.
– Pocos y mal avenidos.
– Poderoso caballero es don dinero.
– Por dinero baila el perro.
– Por el canto se conoce el pájaro.
– Por el hilo se saca el ovillo.
– Por el interés, te quiero Andrés.
– Por la boca muere el pez.
– Por San Blas la cigüeña verás.
– Por sus frutos los conoceréis.
– Por un clavo se pierde una herradura.
– Por un oído me entra y por otro me sale.
– Por un perro que maté, mataperros me llamaron.
– Preguntando se va a Roma.
– Primero es la obligación que la devoción.
– Que cada palo aguante su vela.
– Querer es poder.
– Quien a buen árbol se arrima buena sombra le cobija.
– Quien a hierro mata, a hierro muere.
– Quien bien ata, bien desata.
– Quien bien siembra bien recoge.
– Quien bien te quiere, te hará llorar.
– Quien busca halla.
– Quien calla otorga.
– Quien con fuego juega se quema.
– Quien con lobos anda, a aullar se enseña.
– Quien con niños se acuesta mojado amanece.
– Quien da pan a perro ajeno pierde pan y pierde perro.
– Quien da primero, da dos veces
– Quien de joven no trabaja de viejo duerme en la paja.
– Quien enferma de locura, no tiene cura.
– Quien esté libre de culpa que tire la primera piedra.
– Quien guarda, halla.
– Quien hace lo que puede no está obligado a más.
– Quien hizo la ley hizo la trampa.
– Quien llega tarde, ni oye misa ni come carne.
– Quien mal anda mal acaba.
– Quien más pone, más pierde.
– Quien más tiene, más quiere.
– Quien mucho abarca poco aprieta.
– Quien mucho duerme, poco aprende.
– Quien nace lechón, muere cochino.
– Quien no barbecha no cosecha.
– Quien no se arriesga, no pasa la mar.
– Quien no siembra no recoge.
– Quien no te conoce que te compre.
– Quien no tenga cabeza, que tenga pies.
– Quien no tiene padrino, no se bautiza.
– Quien paga descansa.
– Quien paga manda.
– Quien tiene boca se equivoca.
– Quien predica en el desierto pierde el sermón.
– Quien roba a un ladrón, tiene cien años de perdón.
– Quien se pica ajos come.
– Quien siembra vientos recoge tempestades.
– Quien tiene un amigo tiene un tesoro.
– Quien todo lo quiere, todo lo pierde.
– Rectificar es de sabios.
– Renovarse o morir.
– Reunión de pastores, oveja muerta.
– Resultó peor el remedio que la enfermedad.
– Salir de Guatemala y entrar en Guatepeor.
– Santa Rita, Rita, lo que se da no se quita.
– Sarna con gusto no pica.
– Se dice el pecado pero no el pecador.
– Se dice el pecado pero no el pecador.
– Si dices las verdades, pierdes las amistades.
– Si hay trato, pueden ser amigos perro y gato.
– Si la envidia fuera tiña, ¡cuántos tiñosos habría!.
– Si la montaña no va a Mahoma, Mahoma va a la montaña.
– Si no puedes con tu enemigo, únete a él.
– Si no quieres una taza, taza y media.
– Si no te envidia nadie, poco vales.
– Si te mandare tu mujer arrojarte de un tajo, ruega a Dios que sea bajo.
– Siempre sale a hablar quien tiene por qué callar.
– Sobre gustos no hay nada escrito.
– Tal amo, tal criado.
– Tanto tienes, tanto vales.
– Tanto va el cántaro a la fuente que al final se rompe.
– Tirar la piedra y esconder la mano.
– Todo se pega menos la hermosura.
– Todo tiene remedio menos la muerte.
– Tras cornudo, apaleado.
– Tripa vacía, corazón sin alegría.
– Un clavo saca otro clavo.
– Un grano no hace granero, pero ayuda al compañero.
– Una aguja en un pajar, es difícil de encontrar.
– Una cosa es predicar y otra dar trigo.
– Una imagen vale más que mil palabras.
– Una mano lava a la otra, y ambas la cara.
– Una vez te casarás y mil te arrepentirás.
– Unos lo siembran, y otros lo siegan.
– Unos nacen con estrella y otros estrellados.
– Unos por otros, la casa sin barrer.
– Unos tanto y otros tan poco.
– Unos tienen la fama, y otros cardan la lana.
– Uso hace maestro.
– Vemos la paja en el ojo ajeno, y no vemos la viga en el nuestro.
– Vísteme despacio que tengo prisa.
– Zapatero, a tus zapatos.
– Zurrón de mendigo, nunca bien henchido.
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