LOS ALCÁZARES/ Accidente sin daños personales en el Paseo Río Nalón que debe servir de aviso.

Una estructura metálica colocada en mitad de la calle se precipitó al suelo 17-03-2017 10:37:01

MORENTE

 El pasado lunes pudo ocurrir un grave accidente con daños personales que afortunadamente no se produjo porque ni estamos en temporada ni era hora de atención al público en la mayoría de las falsas terrazas hosteleras instaladas con carácter permanente en el Paseo Río Nalón. Una vez más se pone de manifiesto que el plan de prevención de riesgos en el municipio consiste, precisamente, en que no hay plan alguno. Seguridad cero en este tipo de espacios urbanos.
Una estructura metálica colocada en mitad de la calle se precipitó al suelo, posiblemente por efecto del viento, cuando no había personas debajo. Es fácil imaginar las consecuencias si hubiese ocurrido dentro de pocas fechas, en Semana Santa, cuando la mayoría de las terrazas reinicien su actividad o, lo que hubiese sido peor todavía, en esas horas del verano en las que no se puede ni dar un paso en todo el paseo sin tropezar con mesas, sillas y comensales, especialmente durante la noche. El reportaje fotográfico adjunto muestra imágenes de la terraza que se ha venido abajo, en diferentes días y horario. La segunda parte del vídeo se refiere también a la terraza en cuestión. Menos mal que no se cayó en uno de esos momentos de máxima concurrencia.
Al amparo de una normativa que regula la ocupación de la vía pública con instalaciones temporales (sombrillas, toldos, mesas y sillas), que deben retirarse diariamente al finalizar la jornada comercial, el Ayuntamiento permite e incentiva la ocupación duradera, mediante instalaciones fijas que no se retiran nunca, de amplios espacios peatonales con todo tipo de montajes, tinglados y estructuras ancladas al suelo con tornillería y cerrojos. Los establecimientos ‘envían’ a la calle luz, música e imagen (televisores) mediante instalaciones eléctricas aéreas (cables volados) y peligrosas, expresamente prohibidas por las Ordenanzas Municipales. Las fotos adjuntas dan fe de ello, incluido el establecimiento donde ocurrió el accidente.
En 2013 el Ayuntamiento entró a saco en el paseo y arrasó nueve palmeras con el pretexto de que a una se le había caído la copa (precisamente por falta de tratamiento contra el escarabajo picudo rojo) y había peligro para las personas que circulasen por esa vía. La mayoría de las palmeras no tenían mal alguno pero el espacio que ocupaban (con sus alcorques) podía rentabilizarse cediéndolo a los establecimientos para cubrir sus terrazas con techos practicables. En la foto de portada hay una muestra: un cuadrado del enlosado de color más claro, bajo el poste medio caído que hay junto a la fachada. Una palmera y su alcorque pasaron a mejor vida. Pues bien, por la misma razón que entonces: PREVENIR RIESGOS PERSONALES, podrían ordenar la retira inmediata de todas las estructuras que invaden la vía pública.
Avisadas quedan las autoridades municipales y a tiempo están de empezar a rectificar lo que vergonzosa, abusiva y descaradamente están consintiendo. Si no saben por dónde empezar que den paso a otros que sean capaces de poner a cada uno en su sitio. Un paseo es un paseo, no comedor y trastero.
¬ ACTUACIONES NECESARIAS PARA LA RESTITUCIÓN DEL PASEO RÍO NALÓN.
1º) Despejar totalmente la superficie ocupada por negocios en la calle, dejándola tal y como estaba cuando el Ayuntamiento recepcionó la Urbanización, que incluía una calle peatonal ajardinada con equipamiento propio de un paseo. Las fotos publicitarias de las promotoras de la urbanización dan fe de ello.
2º) Reconstruir los alcorques enlosados. Replantar las 33 palmeras taladas. Reponer las 4 jardineras que fueron retiradas. Volver a colocar los 12 bancos ubicados inicialmente a ambos lados del paseo, agrupados luego en el centro y retirados definitivamente cuando el PP accedió al gobierno local. Colocar las 15 papeleras que faltan.
3º) Determinar el número de establecimientos molestos que pueden ubicarse en este Residencial, sin saturarlo de bares y restaurantes que le hacen perder su uso y función, que no es industrial. Garantizar la seguridad. Someterlo a la consideración de los residentes.
4º) Concretar la superficie de paseo que puede ser ocupada por falsas terrazas (hosteleras o no) que, en todo caso, deberá ser proporcional al aforo de los establecimientos, V. gr. un restaurante con aforo para 50 personas no puede disponer de una terraza para más de 100, como actualmente ocurre. Todo ello debidamente consensuado con los residentes, que son los más afectados por las molestias.