Dos goles del emeritense en la segunda parte permiten a los granas ganar en el campo de la Real Sociedad B y seguir con la buena racha tras su triunfo en casa del Intercity
LA OPINIÓN
Recursos. Muchos recursos. Eso es lo que tiene Mario Simón en su plantilla y eso es lo que está dando vida al Real Murcia en este inicio liguero. A diferencia de la pasada campaña, en este curso, hay muchas opciones ofensivas, y Mario Simón está sabiendo sacarles partido. No le salió al técnico grana dar la titularidad a Loren Buron frente a la Real Sociedad B, pero sí le salió agitar el árbol en la segunda parte. Porque el Real Murcia que perdía desde el minuto 41, cuando Martón aprovechaba un error defensivo para adelantar a los locales en el marcador, firmó una remontada al ritmo de Dani Vega. Dos goles del emeritense en apenas once minutos, permitían a los murcianistas mantener la sonrisa en Zubieta y firmar su segunda victoria consecutiva, para a las primeras de cambio llevar la voz cantante en la Primera RFEF.
Solo cuatro minutos necesitó el Real Murcia para encontrar la conexión de los tres jugadores que están llamados a liderar a los granas esta temporada. Con Javi Rueda calentando motores y Ganet metiendo el balón al área, Pedro León no encontraba puerta ante Marrero. Era un aviso, pero no tuvo continuidad. Porque fue la Real Sociedad B la que generó miedo en apenas un minuto. Reaccionó bien Miguel Serna para evitar el gol de Kortajarena y luego fue el palo el que se alió con los murcianistas, que vieron cómo el disparo de Magunazelaia se estrellaba en la madera y mantenía el 0-0 en el marcador.
Ese inicio vertiginoso se calmó demasiado pronto. Solo llegaba el Real Murcia al área de Marrero en acciones a balón parado o con zapatazos de Ganet, que no dejó de intentarlo en toda la primera parte. Sin embargo, faltaba presencia en los últimos metros, donde nadie era capaz de conectar con Miku, otra vez demasiado apagado. No hizo daño el Real Murcia en sus tímidos acercamientos y tampoco en una clara ocasión de Íñigo Piña a la salida de un córner. El central grana, completamente solo, cabeceó sin encontrar portería por muy poco.
Todo parecía indicar que el marcador no se iba a mover antes del descanso. La Real, quitando los primeros minutos, no había inquietado a Miguel Serna; y al Real Murcia le faltaba más chispa dentro del área. Sin embargo, el minuto 42 supuso un auténtico jarro de agua fría para los de Mario Simón. El filial realista aprovechaba una contra que dejaba a Martón en una situación inmejorable. A la vez que Alberto González, a contrapié, se escurría, el atacante local se marchaba solo para batir de vaselina a un Miguel Serna completamente vendido. Con la batalla en el terreno de juego muy igualada, el marcador se movía a favor de una Real B que había firmado un empate y una victoria en sus dos primeras jornadas.
Mantuvo Mario Simón la maquinaria a la vuelta de vestuario. Y al primer minuto otra vez Pedro León y Ganet eran los encargados de reactivar el ataque grana, pero de nuevo fue un espejismo. La igualdad volvió a primar sobre el césped, con una Real que aprovechaba cualquier oportunidad para desequilibrar con Jonatan Gómez y Magunazelaia. De hecho, en el 51, los de Sergio Francisco volvieron a tener otra clara ocasión para finiquitar el partido, pero el disparo de Dadie se estrelló en el cuerpo de Julio Gracia, decisivo para los suyos.
Un cambio decisivo
No conseguía el Real Murcia encontrar un camino diferente a Pedro León. Con Miku completamente desaparecido y con un Loren Buron que apenas fue capaz de desequilibrar en su primer partido como titular en esta liga, parecían claros quiénes iban a ser los jugadores sustituidos en la primera ventana. Y eso ocurrió en el 64, cuando el delantero y el extremo dejaban su sitio en el campo a Andrés Carrasco y Zeidane. Pero el cambio decisivo llegaría diez minutos después. Mario Simón volvía a agitar el árbol para aumentar las balas ofensivas. Se marchaba Arnau Solá y aparecía un Dani Vega que solo tres minutos después ya estaba celebrando su primer gol como murcianista. Con un disparo cruzado batía el emeritense a Marrero, poniendo el 1-1 en el marcador y dejando al Real Murcia en una situación ideal para lanzarse a por los tres puntos.
Pero Dani Vega, que en la primera jornada no tuvo mucha suerte cuando Mario Simón le probó de ‘falso 9’, estaba decidido a dar un golpe sobre la mesa para volver a la titularidad. Y lo hizo en el minuto 86, cuando volvió a batir a Marrero en otra gran jugada personal que iniciaba desde la banda. En solo once minutos, el emeritense había desbloqueado el ataque del Real Murcia para merendarse a una Real Sociedad B que parecía tenerlo todo controlado y que de repente se vio sin opciones de puntuar en el partido.