
El partido debate qué hacer finalmente, pero el adelanto electoral a julio hace saltar por los aires su plan de aguantar
LA OPINIÓN
Ciudadanos reúne a las 11 de la mañana a su comité nacional para decidir si se presenta o no a las elecciones generales tras el fuerte batacazo sufrido el 28 de mayo, que ha dejado al partido naranja al borde de la desaparición. La decisión no está tomada y el único órgano que tiene capacidad para hacerlo es este. Pero algunos dirigentes de peso ya han manifestado su opinión en las últimas horas y, en algunos casos, como el de Inés Arrimadas, es clave. La expresidenta del partido y principal activo político no es partidaria de concurrir. Y sin ella al frente de la candidatura, la mayoría de cargos consideraría que no tienen opciones. El único cabeza de cartel con posibilidades es la jerezana y su decisión es no hacerlo.
Así se lo ha ido trasladando a casi todos los dirigentes de la ejecutiva en las últimas horas y será la posición que defienda hoy en la reunión. Su opinión es compartida por otros dirigentes de peso, diputados y también es lo que piensa Begoña Villacís, aún vicealcaldesa de la capital y que el domingo se quedó sin representación en el Palacio de Cibeles sufriendo un durísimo golpe que no esperaba.
Según ha podido saber este diario, hay otras opiniones encima de la mesa: algunos dirigentes opinan que sí deben presentarse, otros apuestan por hacerlo solo por determinadas circunscripciones, ya que no acarrearía un gasto económico tan importante y sería la manera de seguir existiendo como opción política. La postura mayoritaria, sin embargo, es la de dejar pasar este tren, coger fuerzas y ahorrar el presupuesto interno para futuras citas electorales.
Ciudadanos quiere trasladar la idea de que no echa el cierre definitivo. Sus actuales líderes, Adrián Vázquez y Patricia Guasp, siempre han mantenido que el partido terminaría el ciclo electoral “ocurriera lo que ocurriera” el 28 de mayo. Pero el adelanto electoral al 23 de julio anunciado por Pedro Sánchez ha hecho saltar por los aires todas las previsiones. En la formación admiten “que no hay tiempo” para asumir un reto de esta magnitud, y aseguran que si las generales hubieran sido en noviembre o diciembre “sí habrían concurrido”.