‘La Vanguardia’ publica el cortometraje del videomaker JJ. Breis, un retrato de la tercera edad en la pandemia
Este vídeo trata de mostrar la cara más natural y auténtica Fuensanta López Sánchez, de 94 años, quien, a pesar de estar tan expuesta al peligro de la Covid y con degeneración macular, supera cualquier obstáculo y vive su día a día con armonía, paz interior y es incapaz de culpar a nadie.
Fuensanta vive en Archena (Murcia), el pueblo de al lado de Ceutí. Es mi abuela por parte de madre. Empezó a coser de joven. Pero su tarea fue cuidar a sus hijas en casa, ya que quería que ellas estudiasen una carrera hasta que se casaran y ya pudieran independizarse.
Su marido era recaudador de la contribución en Archena y pueblos colindantes. A ella le hubiese gustado haber podido estudiar, ya que fue poco a la escuela. Sus aficiones han sido siempre leer novelas e historia. Está pendiente de la actualidad constantemente.
Yo soy su nieto, JJ. Breis. Soy videomaker (creador de vídeos), tengo 30 años, vivo en Ceutí y estudié comunicación audiovisual. Tengo pasión por el vídeo y por eso doy lo máximo en todos mis proyectos.
En este caso, la idea surge tras la polémica de las vacunaciones en toda España. Realmente, no quise criticar a nadie, sino mostrar la cara positiva de la situación. Evitar espetar críticas continuas. Con lo fácil que es a través de internet hoy en día eso. Así que decidí ir a ver a mi abuela.
La llamé por la tarde el día anterior a la grabación, me dijo que fuese a las 10 de la mañana del día siguiente y no desayunó hasta las 12:30 horas, que me fui. Además, quería probar un nuevo filtro recién comprado para mi objetivo, así que era la situación ideal.
A los mayores sólo hay una manera de ayudarles, dejándoles su espacio para evitar contagiarlos, hacerles una visita de vez en cuando desde la puerta.
Fuensanta, en su casa de Archena (Murcia).
Por eso, quiero enviar un mensaje de esperanza a todos esos abuelos y abuelas, que sigan siendo fuertes, que aguanten y que muy pronto estaremos ahí sus nietos par darles el abrazo que se merecen.
A Fuensanta el éxito no le gusta. Le genera un poco de pudor. Ella mantiene su espacio y no quiere que la invadan. Es una mujer muy tranquila y, tras hacerse público este vídeo, ha recibido llamadas incluso de sus primos lejanos, que hacía tiempo con los que no hablaba.
La gente está volcada con ella, debido a su actitud»
Hemos recibido directamente emails de gente de Asturias o Catalunya. Comentarios en Facebook desde Argentina, Chile o México. Otros que van a utilizar el vídeo para difundirlo entre los más jóvenes por el tema de la educación y respeto a los mayores.
La quieren abrazar. Si testimonio ha ayudado a miles de ancianos. Y esas personas que no han podido conocer a sus abuelos que sepan que eran así. Tal cual.
