Alcaraz avasalla a Zverev para coronarse en Madrid

El murciano derrota al alemán en apenas una hora de juego para sumar su segundo Masters 1.000 del año

Carlos Alcaraz Garfia avasalló a Alexander Zverev, número 3 del mundo, para proclamarse campeón del Masters 1000 Mutua Madrid Open. En la Caja Mágica, el murciano hizo magia en un torneo espectacular, donde derrotó a NadalDjokovic y el alemán para ganar su quinto título como profesional, el sexto sumando el Next Gen de Milán. Por 6-3 y 6-1 en apenas una hora, el murciano volvió a demostrar que ha nacido una gran estrella, que transmite toda su energía a un público que se entrega desde el primer momento.

No le pesó el ambiente

A Carlos Alcaraz no le pesó el ambiente ni estar frente a Zverev, que le había ganado cómodamente en los dos enfrentamientos que habían disputado anteriormente. Y es que a Carlitos siempre le ha gustado ser protagonista. Cuando era niño y sus entrenadores querían protegerlo porque ya generaba mucha expectación, él siempre prefería jugar en la pista central. Y en Madrid, en la Caja Mágica, con las gradas llenas, lo volvió a demostrar. El primer set lo zanjó en solo 31 minutos, con un juego excelso, mostrando todo ese repertorio de golpes y de soluciones a los problemas que le planteaba el gigante jugador de Hamburgo, de 1,98 metros, al que Juan Carlos Ferrero entrenó durante varios años. En la primera manga ya ganó el tercer juego con su servicio en blanco y dispuso de la primera bola de rotura en el cuarto, pero Zverev la salvó con solvencia. Sin embargo, en el sexto llegó el ‘break’. Alcaraz dispuso de tres bolas para sumarlo y en la primera lo logró (4-2). Buscando siempre la derecha de su rival, donde más sufre el alemán, y con un primer servicio potente, el murciano caminó con paso firme hasta el triunfo en el primer set. Y lo logró en el noveno juego, donde dejó en blanco de nuevo a su rival (6-3).

Asedio a Zverev

“La Caja Mágica es mi pista favorita. Aquí me transformo”, dijo Zverev tras ganar en semifinales a Stefanos Tsitsipas. Pero en la final se encontró con un rival cargado de confianza después de sus triunfos ante Rafa Nadal y Novak Djokovic. Ni los problemas que tuvo en el tobillo contra el mallorquín le pasaron factura. Pero es que el físico de Alcaraz es prodigioso. Hace dos años, después de unas pruebas de esfuerzo, los médicos le dijeron que podía correr una maratón si quería. Y en el último año, ese poderío se ha acrecentado gracias al trabajo de sus preparados físicos. En el segundo set, el murciano avasalló a Zverev, alicaído, sin respuesta al juego de su rival. Ya en el tercer juego, Alcaraz logró la primera rotura de servicio (2-1). Mientras, el alemán trataba de cortar la hemorragia sin conseguirlo. Cambiaba su raqueta por segunda vez, quejándose del cordaje. Pero el problema es que Alcaraz le había desquiciado. Lo demostró en el quinto juego, cuando falló dos bolas en la red y el murciano le rompió de nuevo el servicio con un globo (4-1). Llegó el 5-1 dejando el de El Palmar a su rival en blanco y en el siguiente juego Alcaraz tuvo tres bolas de partido. Salvó las tres el germano, pero después cometió dos dobles faltas y le entregó el triunfo a la nueva estrella del tenis mundial.