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El presidente critica la deriva del PP «rendida» a la ultraderecha y haciendo una oposición «esperpéntica»
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Sánchez pide a Junts que haga «política con mayúsculas» al servicio de la gente en vez de «abonarse al bloqueo»
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha criticado la oposición absolutamente destructiva, abonada al esperpento y rendida a la ultra derecha que se ha producido en nuestro país tras las últimas crisis. En momentos como la guerra de Ucrania, la Pandemia o el volcán de la Isla de la Palma. La oposición no ha aportado propuestas ni arrimado el hombro «cuando la situación lo requería».
Los ciudadanos, dice Sánchez, necesitan la acción pública y dependen de lo que se debate en el Congreso de los diputados. Por eso, apela «a los grupos parlamentarios al espíritu de acuerdo». El objetivo, mantener el estado bien estar, que confronta con las respuestas de la derecha. Sánchez sostiene que desde la crisis financiera y las respuestas neoliberales que se ofrecieron «asistimos al colapso político de la derecha tradicional en nuestro país y en nuestro continente», algo que califica cómo «fracaso político intelectual de la derecha europea» donde todos los resultados han resultado ser productos de mantras equivocados.
En referencia a Junts, Sánchez sigue:» ahora hay otros grupos que se quieren abonar a ese bloqueo». Por eso se pregunta qué argumentos pueden existir para bloquear la ley que protege a niños y adolescentes en entornos digitales o «para que no salga adelante la ley de familias en un país como el nuestro que sufre un invierno demográfico». «De esto estamos hablando, señorías, de hacer política con mayúsculas, al servicio de los ciudadanos», asevera el presidente. «Voten esos ciudadanos lo que quieran votar, piensen lo que piensen», añade.
Sánchez exige a Abascal «no pactar» con el PP en Valencia y elecciones
El gobierno, dice Sánchez, estará «vigilante «a las negociaciones del PP y Vox en la Comunidad Valenciana para que «ninguno de esos acuerdos vulnere nuestros compromisos europeos ni la legislación vigente en materia de derechos y libertades». El presidente del Gobierno, ha insistido en pedir se convoquen elecciones en Valencia y se ha dirigido al líder de Vox: «Desde esta tribuna le vuelvo a exigir a Abascal que no pacten con la derecha y que los valencianos vayan a elecciones«.
Sánchez teme que el acuerdo entre PP y Vox para investir a un nuevo president de la Generalitat acabe con toda la «arquitectura institucional y presupuestaria» para hacer frente a la emergencia climática en la Comunidad Valenciana, un territorio que «se ha visto afectado por las consecuencias» de la misma, como a su juicio quedó demostrado en la dana de octubre de 2024 que se saldó con más de dos centenares de víctimas. «Los valencianos no quieren más dosis de negacionismo», dice Sánchez, «sino cambiar el rumbo tras el desastre que han traído a la Comunidad Valenciana».
«Por eso, lo que está pidiendo el Partido Socialista» y a juicio de Sánchez «una amplia mayoría de la ciudadanía en la Comunidad Valenciana», son elecciones. «Para romper esa mayoría negacionista y para que pueda haber un futuro diferente, más comprometido con la ciencia y con la razón», remata.
Sánchez, sobre la corrupción: «Tolerancia cero»
En su comparecencia ante el pleno del Congreso, Pedro Sánchez también ha insistido en su mensaje de «tolerancia cero contra la corrupción» y colaboración total con la justicia. El PSOE, dice, actúa en consecuencia «no ahora, sino desde que llegamos al Gobierno». En este sentido alude a medidas adoptadas por su ejecutivo, como la incorporación al ordenamiento jurídico del delito de enriquecimiento ilícito, las 31 medidas del Plan de Acción por la Democracia o el Plan Estatal de Lucha contra la Corrupción comprometido el pasado verano.
La corrupción, según Sánchez, «adopta muchas formas». Pueden ser cargos públicos «que cobran mordidas por hacer cosas ilícitas», comisionistas que «cruzan la frontera de la ley» o partidos políticos que «recortan y privatizan los servicios públicos a cambio de determinados favores o apoyos económicos de amplio espectro».
Sánchez carga con la gestión sanitaria de las comunidades populares
En su comparecencia, el presidente del Gobierno ha criticado a las Comunidades Autónomas gobernadas por el PP por su gestión de los fondos públicos y el dinero transferido desde el Gobierno central: «este Gobierno ha revertido los recortes de la derecha, con 300.000 millones de euros adicionales para servicios públicos, en trasferencias a las comunidades autónomas. 40.000 millones más para sanidad, un 91% de recursos más en educación». Ante ello, se pregunta , «si el Gobierno central está invirtiendo más en servicios públicos, ¿por qué en muchos lugares las listas de espera y la calidad del servicio están empeorando?». «La respuesta es clara», afirma «porque hay gobiernos autonómicos que están usando el dinero de la gente para satisfacer las exigencias de las élites y para hacer negocios», respondió.
Sánchez ha puesto el ejemplo de Madrid, que «ha recibido casi 130.000 millones de euros» en transferencias del Estado, «43.000 millones más que con Rajoy». Un dinero que según el presidente, la Comunidad de Madrid ha destinado a rebajar los impuestos de las clases altas, ofrecer ayudas a la tauromaquia o firmar contratos con empresas privadas.
Según el presidente, «uno de cada tres euros del gasto madrileño en sanidad va conciertos con clínicas privadas». Pedro Sánchez ha cargado así, directamente, contra «el milagro privatizador» de Isabel Díaz Ayuso, donde «la sanidad se apaga poco a poco mientras brillan las cuentas de resultados de empresas privadas». La presidenta ha convertido Madrid, lamenta Sánchez, se ha convertido «en un Casino en el que Quirón siempre gana y los ciudadanos siempre pierden«.
Lo mismo, dice sucede en Andalucía, donde dice, el ejecutivo de Moreno Bonilla ha recortado el estado de bienestar. Le acusa de una «dejación de servicios» que «viene acompañada de mentiras y negligencias, como está ocurriendo con la crisis inédita en los programas de cribado de cáncer». «Bastaba antes una llamada breve, rutinaria, para ahorrar un sufrimiento inmenso a mucha gente, pero esa llamada nunca llegó», ha dicho Sánchez.» Lo que sí está llegando son excusas, ceses cosméticos y manipulaciones informativas que no ayudan ni a resolver el problema ni a corregir las graves injusticias que este proceso privatizador ha abierto», asevera.
El presidente del Gobierno Sánchez alude a situaciones similares en otras comunidades autónomas gobernadas por el PP como Valencia, Murcia o Aragón. «El patrón es claro», afirma, «El PP se dedica a debilitar y vender la sanidad pública». «Lo que quieren es que los servicios se degraden y las listas de espera se alarguen más allá de lo humanamente aceptable, hasta que a la ciudadanía no le quede más remedio que irse a una clínica privada», insiste.
Todo esto, según Sánchez, es «resultado de un plan premeditado de las derechas para desmantelar nuestro Estado del Bienestar». Algo contra lo que el ejecutivo ha luchado, revirtiendo, según Sánchez «los recortes de la derecha», ampliando «los derechos de la ciudadanía» y apostando por «lo público».

