La Fiscalía pedía para él 25 años de cárcel por un crimen con agravante ideológico. También, tendrá que hacer frente a una indemnización de 200.000€.
Rodrigo Lanza ha sido condenado a cinco años de prisión por la muerte de Víctor Laínez, el hombre vestido con unos tirantes de la bandera española en un bar de Zaragoza. La Fiscalía pedía 25 años de cárcel por un crimen con agravante ideológico cometido en el establecimiento aragonés hace dos años. El jurado popular declaró a Lanza -de 33 años cuando se produjeron los hechos- culpable de las lesiones que causaron la muerte de Laínez, de 55. Además, el condenado -con una trayectoria como antisistema- ya había estado en prisión tras dejar tetrapléjico a un guardia urbana en Barcelona hace 11 años.
La Audiencia ha considerado a Rodrigo Lanza culpable de un delito de lesiones dolosas en concurso con homicidio imprudente y tendrá que hacer frente a una indemnización de 200.000 euros. El joven protagonizó una fuerte pelea en un bar con Laínez, que llevaba puesto unos tirantes con las bandera de España. La familia y la defensa han defendido en todo momento que la agresión fue motivada por la ideología del hombre, aunque Lanza afirmó en todo momento que fue Laínez quien se dirigió a él con un cuchillo. Laínez murió días después en el hospital debido a la gravedad de las heridas causadas por los golpes.
El jurado popular ha considerado que, aunque el condenado no vio los tirantes de España de Víctor, sí hubo un componente ideológico en el crimen. De hecho, en el fallo, se contempla el atenuante de arrebato leve y el de agravante de obrar por motivos de «odio ideológico». Por tanto, Lanza ha sido condenado a cinco años de cárcel y al pago de una indemnización de 200.000 euros en concepto de responsabilidad civil.
«No sabemos ni qué decir», ha comentado el hermano de Víctor en Espejo Público. El hombre se esperaba que Lanza fuera condenado a los 25 años de cárcel que pedía la Físcalia.