Pompeya: el calco íntegro de un caballo que murió durante la erupción volcánica

La campaña actual de excavaciones en Civita Giuliana, fuera de los muros de Pompeya, ha sacado a la luz una serie de ambientes de servicio de una gran villa suburbana, entre ellos un establo.

National Geographic

El Parque Arqueológico de Pompeya ha presentado hoy unos hallazgos extraordinarios realizados en Civita Giuliana, en la zona norte y fuera de los muros del sitio arqueológico, donde desde el pasado mes de agosto se descubrieron unos túneles clandestinos que suponían una amenaza para el patrimonio arqueológico.

La campaña actual de excavaciones en Civita Giuliana, una zona a unos 700 metros al noroeste de los muros de la antigua Pompeyaha sacado a la luz una serie de ambientes de servicio de una gran villa suburbanaconservada de manera excepcional, en la cual se han realizado los siguientes hallazgos: ánforas para guardar el vino y el aceite, utensilios de cocina, una parte de una cama de madera de la cual se ha podido hacer un calco y una tumba de un periodo posterior a la violenta erupción del 79 d.C. y que contenía un esqueleto. La operación de salvamento arqueológico ha sido efectuada conjuntamente por la Procura della Repubblica di Torre Annunziata, los Carabinieri y el Parque Arqueológico de Pompeya.

Y, sobre todo, por primera vez se ha podido obtener el calco íntegro de un caballo adulto que murió como consecuencia de la erupción volcánica. La técnica de los calcos ha permitido restituir el contorno íntegro de un caballo y también la estructura de madera de un abrevadero en lo que antiguamente fue un establo. El équido, probablemente un caballo, presenta unas dimensiones considerables para la época, lo que podría sugerir la existencia de individuos altamente seleccionados en la Pompeya del 79 d.C. En el cráneo conserva guarniciones de hierro con pequeñas hebillas de bronce, una serie de características que indica que se trataba de la raza más noble, aquella descrita por el escritor Columela en De re rustica.

También se han descubierto restos de un segundo animal, partes de los huesos de las patas, de talla inferior. Respecto a la tumba, de época posterior al 79 d.C., conservaba un tubo fittile para hacer libaciones y, como ajuar funerario, sólo tenía un clavo de hierro. El esqueleto corresponde a un individuo de entre 40 y 55 años de edad.