El sueldo de los funcionarios registrará una subida media de más de 700 euros este año

El Gobierno traslada a los sindicatos que aplicará en julio la subida adicional del 0,25%, con lo que eleva el incremento anual al 2,5%

El Gobierno comunicó ayer a los sindicatos que ya ha dado la orden para que el salario de los funcionarios suba, a partir de julio, un 0,25%. Esta cifra se sumará al 2,25% que ya se aplicó a principio de año, y de esta manera los trabajadores públicos se beneficiarán de una subida media de más de 700 euros en el presente ejercicio.

Los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) muestran que el salario medio en el sector público supera los 31.000 euros, cantidad a la que si se le aplica la subida mencionada arroja una cifra que, de hecho, se acerca incluso a los 800 euros brutos, pero también hay que tener en cuenta que la mejora del 0,25% sólo se aplicará durante la segunda mitad del año.

Estas cifras, defienden desde el sindicato CSIF, no representan a todos los trabajadores públicos porque hay muchos que se mueven en cifras mensuales cercanas a los 1.000 euros y para los que el incremento será menor. Sin embargo, también existe el caso contrario, esto es, funcionarios que están muy por encima de esas percepciones. Es el caso, por ejemplo, del personal técnico superior del grupo A, a los que la mejora les reportará una subida que puede llegar a los 1.350 euros anuales.

En todo caso, el incremento del 0,25% corresponde a la parte que se ligó a la evolución de la economía. El acuerdo que dejó prácticamente cerrado el anterior ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, y que certificó el Gobierno de Pedro Sánchez, marcó que si el Producto Interior Bruto (PIB) crecía en 2018, al menos, un 2,5%, los trabajadores públicos verían subir su sueldo un cuarto de punto más. Y el avance no sólo alcanzó el objetivo fijado sino que lo rebasó, ya que fue del 2,6%.

Los sindicatos, sin embargo, han mostrado su enfado porque el Gobierno se ha retrasado en la aplicación de un incremento que ya sabía desde marzo que debía acometer, pero sobre la que no comenzó a trabajar hasta hace unos días. Por ello, CCOO advierte de que «no está garantizado que la subida se aplique en julio» ya que puede que no haya tiempo material. Además, subraya que, en muchos casos, las nóminas de agosto se dejan cerradas también en estos días, por lo que la mejora podría no verse reflejada hasta septiembre. En ese caso, la subida se haría con efectos retroactivos a 1 de julio.

GANANCIA DE PODER ADQUISITIVO

Este incremento supone, evidentemente, una notable subida de la capacidad adquisitiva de los funcionarios. Tal y como explican desde UGT, «en el mes de mayo el IPC fue del 0,8%, por lo que la recuperación de poder adquisitivo para el conjunto de los empleados públicos es, hasta el momento, del 1,7% sin incluir la posible percepción de fondos adicionales para algunos colectivos». «Esta recuperación era impensable hace tan solo año y medio, cuando los empleados públicos sufrieron congelación salarial, recortes y en el mejor de los casos una subida del 1%», añade.

Esa «posible percepción de fondos adicionales» a la que se refiere este sindicato es la subida adicional de otro 0,25% que pueden recibir los funcionarios. En el señalado acuerdo también se estipuló que habría una posible subida de un cuarto de punto que estaría ligada a los fondos adicionales, que debe ser negociada por cada Administración y que no se aplicará de manera automática a todos los funcionarios.

Estas mejoras, además, hay que sumarlas a la que ya experimentaron los salarios el año pasado, y a la que también registrarán el próximo. En concreto, en 2018 los sueldos públicos subieron un 1,75%, que en algunos casos llegó al 1,95% ya que también había una parte ligada a los fondos adicionales pero que en este caso era del 0,2%. Y para el próximo año, el acuerdo trianual que se cerró contempla una subida mínima del 2%.