Un Barça sin sus estrellas solventa sin problemas el partido de vuelta con un cómodo 5-0

La segunda unidad del Barcelona superó con facilidad el trámite ante un inofensivo Real Murcia (5-0) y, tras un notable segundo tiempo, selló en el Camp Nou el pase a los octavos de final de la Copa del Rey en un choque desigual sin historia.

El equipo azulgrana, liderado por Denis Suárez y con la participación de hasta cuatro jugadores del filial, puso fin al sueño copero del equipo murciano, que en la vuelta de los dieciseisavos de final no pudo frenar el vendaval de su rival tras la reanudación, cuando los locales anotaron cuatro de los cinco tantos del choque.

A pesar del 0-3 de la ida, el técnico azulgrana, Ernesto Valverde, apostó por un once con hasta nueve jugadores del primer equipo, mientras que Aleñá y Oriol Busquets -que debutaba en el Camp Nou- fueron los elegidos del filial que empezaron de inicio.